Los comerciantes se dieron modos hoy para comercializar cohetillos, chispitas, luces de bengala y otros fuegos artificiales que están prohibidos por el alto nivel de contaminación ambiental y el riesgo que provocan, según constató en un operativo la Unidad de Gestión Ambiental de la Alcaldía.

Los vendedores escondieron los productos en bolsas negras y mochilas bajo sus puestos o los entregaron a sus hijos para que ellos los comercialicen de forma camuflada.

El jefe de la Unidad de Gestión Ambiental, Gonzalo Maldonado, indicó que hace dos semanas trabajan en la concientización del gremio para que no incurra en el ilícito de comercializar esta mercancía por el daño que genera en el medio ambiente y porque en años pasados hubo casos de niños que sufrieron quemaduras o incluso perdieron la mano al manipular estos objetos.

Durante el operativo se decomisó la mercadería de distintos puestos del mercado Pulacayo y final Lanza, donde los precios por producto oscilaban entre los 3 y 50 bolivianos según el tamaño y característica.

Además, al momento del decomiso, se  entregó a los comerciantes una notificación para que paguen una multa de 2 mil bolivianos.

Maldonado recordó a la población que el uso de los juegos pirotécnicos prohibidos es sancionado así como las fogatas que también tienen una multa de 2 mil bolivianos, según dictamina la Ordenanza Municipal 4210/11.