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  • Diario Digital | martes, 19 de marzo de 2024
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DESDE AFUERA

La banca brasileña acelera su proceso hacia su digitalización

La banca brasileña acelera su proceso hacia su digitalización
La banca brasileña ha acelerado en los últimos años su proceso de digitalización con el reto de readaptar a sus miles de trabajadores, que estarán obligados a reciclarse ante el cierre gradual de las agencias tradicionales.

En medio de la cuarta revolución industrial, la atención personalizada pierde cada vez más peso en la demanda de servicios y, por ello, los bancos han impulsado una agenda digital irreversible y de consecuencias aún en estudio en el gigante suramericano. "La próxima generación no va a ser formada para ser bancario", asegura a EFE el experto en sector financiero Luis Braido, de la Fundación Getulio Vargas.

De acuerdo con datos del Banco Central, los bancos cerraron en Brasil cerca de 1.500 agencias en 2017, récord de la serie histórica, con el estatal Banco do Brasil y Bradesco, segundo mayor privado del país, a la cabeza en esta reducción.

Por el contrario, el año pasado, el volumen de recursos que destinó la banca a la tecnología aumentó un 5 por ciento , mientras que los gastos con software subieron un 17 por ciento hasta llegar a los 9.800 millones de reales (unos 2.600 millones de dólares), según un informe de la Federación Brasileña de Bancos (Febraban).

¿Es el principio del fin de las agencias? Para Eduardo Pedrinha, vicepresidente de ventas para el sector público en Latinoamérica de la compañía de software CA Technologies, no, pero tendrán que reinventarse.

"Deben permanecer pero más bien con un concepto de servicio más diferenciado y personalizado", comentó el ejecutivo de CA, que tiene entre sus clientes "prácticamente a todos los grandes bancos" que operan en el país.

El lucro con la digitalización también aumenta, pues en 2017 las transacciones bancarias subieron un 10 por ciento , impulsadas por las operaciones en los canales digitales, que despegaron un 30 por ciento .

No obstante, de las estadísticas se desprende otro interrogante: ¿qué pasará con los miles de empleados que hoy trabajan en oficinas físicas?

Entre 2015 y 2017 el sector perdió cerca de un 9 por ciento de la fuerza de trabajo, lo que se traduce en unos 40.000 empleados menos, cifra también impactada por la severa recesión que atravesó el país en ese periodo.

En opinión de Pedrinha, en un "ambiente disruptivo, principalmente en el área bancaria, uno precisa adaptarse muy rápidamente" y en este sentido, considera necesaria "la adaptación de las habilidades del trabajador" porque la automatización va a obligar a ello.

"Es adaptar el conocimiento a las necesidades del banco. Si los bancos no crean una política así, van a perder personal en determinados cargos y no van a suplir en otros" departamentos, que van a surgir a partir de esa digitalización, apuntó.

Braido aprecia que ese cambio sería "traumático" si se hiciera de la noche a la mañana, pero cree que se hará de forma gradual, en un plazo de "cinco a diez años".

Por otro lado, la banca pública brasileña no es ajena a la era digital y también ha emprendido el camino de la innovación, aunque un poco más tarde que el sector privado y con el condicionante de su factor más social. La Caixa Económica Federal, el segundo mayor banco estatal de Brasil con unos 87.000 empleados, es una de las entidades que menos agencias ha cerrado, pero eso no ha impedido que haya iniciado su transformación.

Tomado de la agencia EFE