Llegó la temporada invernal y con ella al menos 25 variedades de aves de “zonas altas” del departamento que prefieren soportar las inclemencias del tiempo en las lagunas del municipio de Cercado, que en los espejos naturales de agua de la cordillera del Tunari.

El responsables del Centro de Atención y Derivación de Fauna Silvestre (CAD) de la Alcaldía de Cochabamba, Dennis Soux, explicó que en esta época hay al menos 25 variedades de aves en la laguna Alalay. Añadió que algunas no se pueden apreciar a simple vista, debido a que están anidando en los totorales.

Entre las especies que se pueden ver están las garzas andinas, gaviotas, ibis y patos picazos. La mayoría de los adultos recorre la laguna, seguido de una hilera de entre cuatro y cinco crías.

Seguir a las familias de aves con la mirada es un auténtico espectáculo. Las mamás se sumergen en la laguna hasta que sus cuerpos desaparecen de la superficie, segundos después se las vuelve a ver, pero con el pico lleno de comida -generalmente son raíces de plantas- que les dan a sus crías en sus picos.

Cada bocado provoca que los recién nacidos meneen las colas de felicidad, mientras nadan.

La mayor parte de las aves se concentra en la parte sur de la laguna e intenta desplazarse entre una enorme “alfombra” de plantas acuáticas llamadas lentejas, por su forma parecida a esa especie herbácea.

Desde la Municipalidad explicaron que la reproducción de esa alga está controlada. Su presencia no es dañina, añadieron, pues el agua que está recubierta por lentejas es de mejor calidad que la que no está.

Esto se debe a que evitan que la energía de la luz llegue al agua, donde hay cianobacterias, y estas se transformen en materia orgánica.

8:00

De la mañana

Es el horario en el que se aprecia más cantidad de aves en la laguna Alalay, según los expertos.

La mayoría llegan desde las zonas altas del departamento, huyendo de las crudas inclemencias del tiempo.