Un hombre de 55 años que viajaba de Yacuiba hacia Cochabamba, en un bus, fue dopado por su compañera de viaje, una mujer que le convidó un sandwich durante el recorrido. El pasajero quedó profundamente dormido y la viajera se bajó antes de llegar a la terminal de buses de Cochabamba, aparentemente con varias de las pertenencias de su víctima.

Celestino Coca, internado en el hospital Viedma, despertó ayer, pero todavía no lograba hilvanar bien sus frases. Apenas pudo decir que viajaba en el bus de la flota Latino y que debía seguir viaje hacia Santa Cruz. Contó que una señora le invitó un sandwich. Después de comer, perdió la conciencia.

Consultado sobre qué le había robado la pildorita, Coca balbuceó que tenía un equipo de DVD, una radio y dinero, pero no podía recordar cuánto. El toxicólogo del hospital Viedma, Ramiro Cadima, informó que el viajero será dado de alta hoy, cuando la alteración de conciencia haya sido completamente superada. Explicó que medicamentos de la familia de las benzodiazepinas son fuertes y una sola pastilla es suficiente para dormir a un adulto por buen tiempo. Reveló que, cada año, atiende entre 50 y 70 casos similares y recomendó a los pasajeros no recibir nada de desconocidos.