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  • Diario Digital | jueves, 28 de marzo de 2024
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Niño judío que estuvo clínicamente muerto profetiza una gran guerra y la llegada del Mesías

Niño judío que estuvo clínicamente muerto profetiza una gran guerra y la llegada del Mesías

Durante la noche del último eclipse lunar de la llamada Luna de Sangre de la Tétrada 2014-2015 (cuatro fenómenos en que la luna se tornó de color rojo, en un perfecto alineamiento de la luna, la tierra y el sol), ocurrieron algunos hechos que alteraron la frágil estabilidad política en el Medio Oriente.

De partida, las fuerzas militares de Rusia llegaron hasta Siria y comenzaron con los bombardeos contra el “Estado Islámico” entre el tercer y cuarto día de la fiesta de Sucot o de los Tabernáculos (30 de Septiembre del 2015), ratificando la creencia de que cada vez que hay una coincidencia de lunas rojas con fiestas judías, suceden acontecimientos históricos de importancia para Israel (En 1492, año que hubo una luna roja o de sangre, los judíos fueron expulsados de España; en 1948 también apareció una luna roja en los cielos y fue proclamado el Estado de Israel y se produjo la Guerra de la Independencia; y, en 1967, otro año donde apareció una luna de sangre, se inició la Guerra de los Seis Días en la que Israel luchó contra las naciones árabes y reconquistó Jerusalén como parte de su territorio).
Durante la última luna de sangre, en la primera noche de la fiesta judía de los Tabernáculos, también ocurrió un hecho en apariencia no demasiado importante. Un joven judío llamado Natan, proveniente de una familia no practicante del judaísmo, que visitaba durante las vacaciones la casa de su tío, de repente comenzó a sentirse mal, a temblar inexplicablemente y a sentir sus brazos y piernas ateridos de frío

    
Luego que fuera llevado a un hospital, lugar donde no pudieron diagnosticarle qué le sucedía, el joven fue devuelto a la casa de su familiar para que guardara estricto reposo. Allí se acostó en una habitación cubierto de mantas, sin embargo, al poco rato sintió que su “alma salía del cuerpo”. Sus familiares afirman que estuvo en total 15 minutos clínicamente muerto, sin presentar ningún tipo de signos vitales, hasta que repentinamente volvió a la vida.
Cuando despertó, Natan aseguró que había contemplado una vívida visión: había presenciado la guerra de Gog y Magog, una gran guerra mundial anunciada por el profeta Ezequiel, y había visto al Mesías de pie en el Monte de los Olivos, mientras determinaba la santidad y bondad de las personas y determinaba quien era digno de ser salvado, antes que la montaña se abriera en dos, en una apocalíptica escena que ya había sido anunciada por el profeta Zacarías.
“Vi el momento cuando el Har Hazeitim (Monte de los Olivos) se dividía en dos, y vi al Mashiaj (Mesías) revelado, situado en la entrada… El Mashiaj, en una guerra no muy larga, luchará contra Gog y lo matará. Gog será enterrado en Israel. Él Mashiaj (Mesías) verá lo que de veras cada persona es, de acuerdo a la santidad de esa persona. El determinará si alguien tiene la santidad, si es puro, si cumplió los mandamientos de Dios (mitzvot) y si llevó a cabo actos de bondad. Para ver si realmente las personas tienen verdadero temor del Cielo y no sólo al miedo al castigo.
El Mesías será capaz de detectar por el olor quien es realmente un judío temeroso de Dios y quién no lo es. Y los que se arrepientan sinceramente de sus pecados heredarán el más alto nivel en los cielos”, contó Natan sobre parte de su visión, tras ser entrevistado por un canal de televisión israelí

El relato de Natan llamó la atención de Rami Levi, un rabino que en su juventud tuvo una experiencia cercana a la muerte cuando era un joven soldado judío que combatía en la guerra de El Líbano en 1982. Levi, de hecho, fue el primer religioso que visitó a Natan para determinar si su historia era verídica o un simple delirio. Y, después de conversar con el muchacho, Levi concluyó que sus conclusiones habían sido sorprendentes.
“El muchacho me contó que comenzó a sentirse enfermo, con escalofríos y una sensación de frío en las manos y piernas. Su cuerpo se estremeció de dolor y de repente sus funciones vitales quedaron suspendidas y se encontró flotando sobre su propio cuerpo. Siguió subiendo y subiendo, vio toda la tierra y, finalmente, fue conducido a un túnel. Allí vio una luz que estaba llena de amor y seguridad. Él dice que las palabras no bastaban para explicar lo increíble que era ese lugar. Posteriormente comenzó a experimentar esas visiones del futuro, entre ellas la visión de la guerra de Gog y Magog y la aparición del Mesías en el Monte de los Olivos”, dice el relato del rabino.
Y continúa: “Yo le pregunté muchas cosas: ¿Cuántas personas estaban en el Monte de los Olivos? y ¿Quiénes eran estas personas? El niño contestó correctamente y dijo que también escuchó un ladrido. Pensé que esto era una incongruencia en su relato, pero, después de investigar, descubrí el Zohar (el texto fundacional del judaísmo místico), que afirma que es la voz de la Duma, un ministro de Gehenom (Infierno) que se menciona en el Salmo 115: 17. Antes de ser devuelto, a Natan se le mostró parte de lo que iba a suceder en el mundo. Él dijo que la guerra de Gog y Magog ya había comenzado en el 27 º de Elul (mes judío de contrición y penitencia, llamado “el mes de la piedad y el perdón”), y que no iba a ser un proceso largo”.
Agrega que el adolescente dijo que “todas las piezas estaban en su lugar, pero la situación podría explotar por un incidente en particular en una guerra en toda regla. Yo en ese momento no lo tomé en serio, ya que la fecha ya había pasado sin ningún tipo de titulares o sirenas. Sin embargo, cuando hablé de esto más tarde con un amigo, me señaló que el 27 º de Elul fue el 11 de septiembre del 2015, es decir, el día en que Rusia entró oficialmente en la guerra en Siria”.