"Estamos hablando de casi de un margen de más del 40 por ciento de la población de Cochabamba que todavía no tiene agua potable, agua de grifo", dijo en el marco de una feria instalada en la plaza 14 de Septiembre para conmemorar el Día mundial del agua. 

Según Salazar, la mayor cantidad de los habitantes que están afectados por el problema viven en la zona sur de la ciudad de Cochabamba y poblaciones rurales de los 47 municipios del departamento.

Explicó que las personas que habitan en las áreas urbanas se abastecen de líquido potable por medio de cisternas y la compra de agua embotellada por empresas de cobertura municipal cuya calidad debe ser certificada.

"Está creciendo el consumo de agua embotellada. Que increíblemente se ha convertido en un importante rubro de actividad económica necesaria (...). De 2014 a 2016 ha crecido (esa actividad) casi en un 400 por ciento", apuntó.

Salazar dijo que la provisión de agua en el caso rural se efectúa, generalmente, por medio de vertientes, cauces de ríos y pozos profundos.

Acotó que la construcción de aducciones entre la presa del Complejo Múltiple Misicuni y los siete municipios del eje metropolitano, que albergan al 65 por ciento de la población departamental, es una de las principales medidas que se adoptan para incrementar la cobertura de la red primaria de alcantarillado.

"Ya tenemos agua, hay que construir las aducciones y hay que esperar que los municipios construyan las redes (domiciliarias)", concluyó Salazar.