La propulsión eléctrica y la navegación no tripulada son las dos tecnologías innovadoras que se están desarrollando en estos momentos en torno a la autonomía y la inteligencia artificial.

Según el director de industria aeroespacial de la Universidad Cranfield del Reino Unido, Iain Gray, por primera vez es aplicada en la industria aeroespacial.

El FT-X es el prototipo de auto volador de la compañía Airbus que no necesita piloto. Podrá transportar hasta cuatro pasajeros en menos de cinco años.

Los despegues serán además en vertical, perfectos para no demandar el limitado espacio que existe en los centros urbanos. No requerirán de un aeropuerto.

Reservar uno será tan fácil como reservar un taxi en un teléfono inteligente.

Los beneficios que pueden aportar van desde una mayor comodidad a una menor contaminación y congestión.

"Al principio tendremos un piloto a bordo solo para aumentar la aceptación del público", afirmó Marius Bebesel, ingeniero jefe de este concepto CityAirbus, "pero realmente no habrá mucho que hacer".

En una emergencia, el sistema automatizado del tránsito aéreo se hará cargo, dijo.

Para Gray, sin un conductor el aparato puede volar más lejos, más rápido y de forma más económica.

El primer ejemplo de CityAirbus que sirva de prototipo se espera para finales de este mismo año.

Pero este no será el único modelo de taxi no tripulado.

El "volocopter" espera convertirse, según el director ejecutivo del proyecto Alexander Zosel en el "primer taxi aéreo del mundo totalmente eléctrico". Diseñado para vuelos urbanos de corto alcance, su batería tendrá una duración de entre 16 y 32 kilómetros. Una vez el público tenga confianza, no habrá necesidad de piloto.

Está en proceso de construcción en Alemania y ya obtuvo financiación millonaria de grandes como Mercedes-Benz, Daimler y el gigante tecnológico Intel.

Muchas otras compañías están desarrollando taxis aéreos, entre ellas Ehang, de China; Uber y Vimana.

Los vehículos están pensados para la ciudad, donde los desplazamientos serán cortos y sin necesidad de que la batería tenga una gran autonomía.