El presidente de Bolivia, Evo Morales, dijo hoy que "unos que representan a la oligarquía chilena no quieren" ofrecer "una salida al mar" a Bolivia, país que ha denunciado a Chile ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) para exigir una negociación sobre este tema.


Morales afirmó, en una entrevista con Efe, que tanto gobiernos chilenos "de dictadores militares" como otros "democráticos de derecha e izquierda siempre ofrecieron una salida al mar".


Esa posición se contrapone con los intereses de "la oligarquía chilena", dijo el presidente.


Preguntado por cómo podría convencer a la opinión pública chilena para que acepte dicha negociación, Morales dijo que "los puertos sobre el Pacífico están totalmente privatizados", por lo que "no se trata de convencer a todo el pueblo chileno, sino a esos grupos" de empresarios.


"Siento que grupos de la oligarquía hacen daño al pueblo (chileno), porque su pueblo está por la integración, ya que toda la vida vamos a ser vecinos y hermanos: vecinos geográficamente y hermanos como seres humanos", añadió.


El presidente definió la demanda a Chile ante la CIJ como la manera de "resolver una herida histórica", pues "Bolivia nació con mar, con 400 kilómetros de costa en 1825", pero "en 1879 Chile nos invadió" y "nos dejó sin salida" al Pacífico.


Santiago rechaza tajantemente la posición de La Paz y mantiene que las fronteras entre ambos estados quedaron selladas, tras la Guerra del Pacífico, en el Tratado de Paz de 1904.


"En 1904 fue firmado un tratado impuesto bajo amenazas", respondió Morales, añadiendo que ese documento ha sido "incumplido" por parte de Chile porque, tanto antes como después de ese año, "seguía prometiendo una salida al mar".


"Venimos a La Haya para pedir a la CIJ que nos haga Justicia, que todos los compromisos ofrecidos por Chile se cumplan", añadió.


El equipo jurídico de Bolivia citó hoy, durante el juicio, las once resoluciones que la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) aprobó entre 1979 y 1989, en las que de una u otra forma pidió una solución a ambos países para resolver el tema marítimo.


La delegación chilena dijo minutos después, en una rueda de prensa, que Bolivia aplica un "doble rasero" respecto a la OEA, pues es una institución con la que La Paz ha tenido desavenencias en los últimos meses.


"Nosotros no criticamos a la OEA, la respetamos como institución, pero sí (criticamos) a su secretario general (Luis Almagro), que es un instrumento del golpismo y del intervencionismo de Estados Unidos", dijo Morales.


El presidente boliviano hizo mención a la intervención de uno de sus abogados en los alegatos de hoy, quien dijo que Chile "no puede engañar a la corte", pues ha tenido "una política de dilación" respecto a la demanda marítima y nunca ha "aterrizado" ninguna propuesta.


Morales añadió que en la contramemoria chilena, que formó parte de los alegatos escritos, el país vecino afirmaba que Bolivia era la responsable de "abandonar el diálogo".


"Dicen que nos hemos retirado y han fracasado las negociaciones. Eso es totalmente falso", dijo Morales, pues la afirmación de Chile significaría que el país vecino "reconoce que tiene una deuda" y que "no han cumplido con su promesa".


El mandatario indicó que no tuvo contactos con la delegación chilena durante los cuatro días que estuvo en La Haya, con la excepción de "un saludo al entrar o salir de la corte".


Preguntado por los posibles escenarios que se abrirían tras la sentencia de la CIJ, que se espera para finales de este año o comienzos del que viene, dijo que prefería "no comentar" por "respeto a la corte", pero aseguró que será "respetuoso" con su decisión.


"Pacientemente vamos a esperar. Si hemos esperado 139 años, podemos esperar unos meses", concluyó. EFE