La Organización Deportiva Suramericana (Odesur) visitó el 16 de febrero la Villa Suramericana y en ese entonces mostró preocupación por los accesos a dicho recinto que será para los Juegos Suramericanos Cochabamba 2018. Un mes después, el panorama sigue igual, pues la ciudadela deportiva aún no tiene caminos internos y los externos son precarios.

A menos de tres meses para la realización del evento internacional más grande que albergará la Llajta, se mantiene la preocupación por los caminos que aún no tiene esta obra, que se construye en La Tamborada.

Si bien los 14 bloques fueron concluidos en su totalidad, además de ya ser equipados, no se tiene por dónde circular de edificio a edificio, salvo con vehículos de construcción.

Un mes después de la última inspección, miembros de la Odesur llegaron a la ciudad para ver, entre otras obras, la Villa Suramericana.

Se conoce que el Comité Organizador de los Juegos Suramericanos (Codesur) realizará hoy la inspección al predio de edificios, con personeros de la Odesur y sin acceso a la prensa.

En una visita que hizo OPINIÓN, se vio que no se realiza ningún trabajo en los caminos o accesos internos del predio. Sí se evidenció que hay algunos trabajos de movimiento de tierras, pero no precisamente para hacer las vías.

Incluso, en los pasados días, comunarios del lugar realizaron protestas y bloqueos, en algunos sectores, pidiendo que se aceleren los trabajos en lo que se refiere a caminos y conexiones de alcantarillado.

La Villa Suramericana se emplazó con una inversión de 34 millones de bolivianos e inició su construcción a finales de 2016. A más de un año, aún restan trabajos complementarios y los accesos. Estos bloques serán entregados al Codesur este mes, según anunció el director de la entidad, Juan Manuel Chevarría.

Odesur

Llegaron a la Llajta cinco representantes de la Odesur, entre los que está el vicepresidente Mario Moccia.