Familiares de los dos militares asesinados en la localidad de Cahuana en una emboscada por contrabandistas, entre las poblaciones de La Rivera y Sabaya, del departamento de Oruro, reclamaron el lunes información y justicia por la pérdida de sus seres queridos, mientras se realizaba la autopsia de ley.
"Soy el hermano mayor del sargento Vladimir Siñani Ticona, hasta el momento (casi mediodía), no nos dicen nada, el fiscal no nos da ninguna información, mucha negligencia del Ministerio Publico, tampoco ninguna institución se pronuncia, tampoco vemos que el Ejército se esté querellando contra los autores", dijo a los periodistas Yonel Siñani Ticona.
Los militares Vladimir Siñani, de 24 años de edad, y Fidel Chávez Huarina, de 27 años, funcionarios de la Unidad de Control Aduanero (UCA) fueron asesinados el domingo en la localidad de Cahuana, entre los municipios de la Rivera y Sabaya del departamento de Oruro, durante un operativo contra el contrabando.
Siñani Ticona solicitó al Fiscal General del Estado, Ramiro Guerrero, celeridad en las investigaciones, porque -dijo- ambas víctimas murieron por cumplir su deber.
"Saben que ha muerto en una emboscada por esa gente, son unos franco tiradores, los impactos de ambos son en la cabeza", agregó.
Por su parte, el padre del sargento Fidel Chávez, Francisco Chávez, calificó ese hecho como una "masacre cruel" que se realizó con armas de largo alcance, y a su juicio lo sucedido es responsabilidad de los miembros grupo encargado de ese operativo y de la Aduana, por haber dejado solos a los sargentos.
La viuda del sargento Chávez, Anahí Ala, pidió justicia por la muerte de su esposo que -dijo- era "muy cariñoso y siempre quería superarse estudiar, recién hace tres meses y dos días que nos hemos casado".