Los videos de las cámaras de seguridad que filmaron la primera y segunda explosión "no vinculan casi nada" para las investigaciones, informó el fiscal departamental de Oruro, Mario Rocha.
No quiso referirse a la decisión del Gobierno de otorgar una recompensa de 150.000 bolivianos a quienes contribuyan con información sobre los responsables de haber causado las dos explosiones en la ciudad de Oruro, porque no conocía a detalle la declaración del presidente Evo Morales.
En un breve contacto con ANF el fiscal dijo que las investigaciones continúan y se utilizan todos los medios necesarios para dar con los autores de los siniestros accidentes que dejaron 12 muertos y al menos 50 heridos.
Acotó que el caso "es complejo porque en el lugar de los hechos no hay cámaras de seguridad", hecho que lamentó más aún en una ciudad que acoge a cientos de turistas nacionales e internacionales para la Entrada de la Folclórica de la Virgen del Socavón.
Consultado sobre si las dos grabaciones que se conocieron no contribuyen en las indagaciones, Rocha dijo que "no vincula casi nada", porque "no son contundentes".
En el video de la primera explosión se puede ver el puesto donde se vendía chicharrones, se observa gente que transita por el lugar mientras que otras están paradas muy cerca, cuando en fracción de segundos aparece una luz roja y naranja y una nube de humo cubre todo el lugar.
El otro video que mostró la Policía incluido un identikit de un joven del que presumía era el autor fue descartado después que esta persona se presentó de manera voluntaria ante la Fiscalía para descartar su autoría.
El presidente Morales ofreció una recompensa de Bs. 150 mil a quien de información fidedigna para dar con los responsables de las explosiones en Oruro que, según aseguró, "según las investigaciones se trata de atentados".
"Esta madrugada he decidido (...) dar una recompensa de 150 mil bolivianos porque tenemos que dar con el autor, tenemos obligación de cuidar la vida, salvar la vida" dijo Morales y anunció que la recompensa será entregada "al hermano o la hermana que nos dé información verídica sobre el autor de este atentado".
El sábado 10 de febrero se produjo la primera explosión, el hecho dejó ocho muertos y 40 heridos. La Policía y el Ministerio de Gobierno atribuyeron a una garrafa de gas la causa de la detonación, versión que fue descartada después de la segunda explosión del 13 de febrero cuyo saldo fue cuatro muertos y 10 heridos.
Tras este ultimo hecho, las autoridades cambiaron su versión sostuvieron que existía vinculación entre ambos casos en los que se había usado dinamita. El Ministerio Público aseguró que nunca sostuvo que la causa de la explosión fuera una garrafa.
Ambos casos siguen en investigación y a la fecha el Ministerio Público sigue manejando varias hipótesis.