"Tanto en el Hospital Oruro Corea y el Hospital General se atendió a los heridos sin ninguna restricción, recién se contabilizará a cuánto alcanzan los gastos, por lo menos hasta el momento está sobrepasando creemos el millón de bolivianos, aún falta evaluar los gastos en las clínicas privadas", dijo a los periodistas.

El gobernador explicó que como primera autoridad departamental coordinó la curación de los heridos, un tema complejo porque los heridos requerían atención especializada, varios de ellos son de La Paz y regresaron a su ciudad.

Agregó que se trasladaron a 11 pacientes a La Paz para recibir atención especializada, quienes se recuperan y 14 aún están internados en hospitales de Oruro, de quienes los más graves son del niño que perdió la vista y otros que sufrieron la amputados sus miembros.

"En este momento se coordina con los familiares de los heridos para cubrir los gastos que cada familia realizó en la compra de medicamentos y otros", señaló.

En ambas explosiones fallecieron 12 personas y las primeras investigaciones de la Policía establecieron que se trató de explosiones provocadas con dinamita y anfo y en el segundo caso presentó un retrato hablado del sospechoso.