Una de las sobrevivientes de la explosión que provocó 8 muertos en Oruro manifestó, a un grupo de periodistas desde la cama del Hospital General San Juan de Dios, sus dudas de que el siniestro  se debiera a una fuga de gas y reclamó a las autoridades que sigan investigando.
"No creo que la garrafa haya explotado. Las autoridades tienen que seguir buscando de dónde ha venido esto.
La mujer que fue identificada como Calderón era vendedora de chocolates, y cuando ocurrió el hecho estaba cerca del puesto de comida abrigando a su nieta.
Estaba agachada cuando ya nomás sentí una sensación como un golpe que me agarraba mi cara, estaba bien caliente y me ardía", dijo  la mujer de 46 años que espera una cirugía por las heridas que sufre en rostro y cuello.
La vendedora reiteró sus dudas de que fuera una explosión de gas, "porque era un humo muy blanco, como si alguien nos hubiera botado tierra", apuntó que el suceso se produjo después de un incidente con personas que bebían alcohol y una de ellas fue recriminada por la gente cuando iba a orinar en plena calle.
La compañera del puesto donde estaba la garrafa "había desaparecido" y en la ambulancia en que fue llevada al hospital "había mucha gente", incluida una niña, recordó entre sollozos por las compañeras fallecidas.
El jefe del Servicio Departamental de Salud en Oruro, Jesús Ignacio, confirmó que los fallecidos son 8, entre ellos 4 menores, y 34 los heridos que siguen hospitalizados, nueve de ellos fueron trasladados a la ciudad de La Paz. Asimismo, declaró que la Policía Boliviana "ha confirmado ya" que la explosión ocurrió tras una fuga de gas de una garrafa en un puesto ambulante de comida.