Opinión Bolivia

  • Diario Digital | jueves, 25 de abril de 2024
  • Actualizado 00:06

ETAPA 6

La fiesta del Dakar llega a una Bolivia agitada

La “fiebre dakariana” se sintió en la sede de Gobierno, en especial por los competidores nacionales que fueron “los héroes”.
La fiesta del Dakar llega a una Bolivia agitada



Lloraron, se llenaron de emoción, gritaron, aplaudieron y se entregaron al recibimiento que les hicieron en la rampa de bienvenida. Los pilotos bolivianos sintieron el calor humano de toda su gente una vez que arribaron ayer a suelo paceño, después de una sexta etapa en la que unos destacaron y otros se conformaron por terminar una jornada más de la competencia más dura del mundo.

El primero en acabar la etapa fue el Cachorro Daniel Nosiglia que no pudo tener un mejor día en la competencia, pues acabó en el séptimo puesto, con un tiempo de 1 hora con 53 minutos y 26 segundos, y el público paceño se le abalanzó encima en varios tramos del enlace entre El Alto y La Paz. Dani se mantiene en el puesto 14 de la general.

No fue menor el recibimiento a su padre, el Lobo del Desierto, que derramó lágrimas en cada punto que paró durante su camino al estadio Hernando Siles. Walter terminó la etapa en el puesto 11 (2:39:09) y escala a la casilla 12 de la clasificación total.

Ambos fueron bien recibidos por el presidente Evo Morales y el vicepresidente Álvaro García Linera, en la rampa.

“Casi no llego. Toda la gente se me puso encima para felicitarme y agradecerme (entre lágrimas). Es lindo ver este tipo de accciones, que sin importar el puesto, la gente se lanzó hacia mí”, dijo el Lobo del Desierto que tuvo que competir la etapa con un resfrío y un dolor en la garganta que arrastra desde la cuarta etapa.

Después arribó el cruceño Juan Carlos Chavo Salvatierra que, como todos los años, fue recibido en medio de gritos, banderazos, y papeles picados.

“La competencia pasa a un segundo plano cuando te tratan de esta manera”, sostuvo en su arribo al centro paceño.

El oriental arribó en el puesto 32 de la jornada (2:07:25), y se mantiene 27 en la general. Esta etapa corrió con otra moto “más liviana”, con el objetivo de acelerar y recuperar “terreno”.

Otro de los protagonistas de la noche fue el paceño Hernán Paredes (cuadriciclos), que, con su ya famoso cartel “Mar para Bolivia”, se entregó a la “fiesta dakariana” que se armó durante el enlace a La Paz. Incluso, su esposa y sus dos hijos no aguantaron las ganas de ir a abrazarlo y besarlo. El piloto de cuadras acabó la etapa 6 en el puesto 26 (3:06:23) y está 36 en la general.

En un gesto aparte, el piloto cochabambino Danny Nogales, que estuvo presente en el palco, se acercó a Paredes y le agradeció por el apoyo, pues el paceño fue uno de los bolivianos que ayudó al Piloto del Pueblo, a intentar solucionar su problema con su motocicleta KTM, en el vivac de Lima.

“¡Vamos querido!”, le dijo Nogales a su compañero en el palco, según se vio en el canal BoliviaTV.

Cerca a las 20:00 de ayer llegó a la rampa el oriental Marco Bulacia que, de igual manera, no ocultó su satisfacción por concluir la etapa y recibir el aliento del público paceño y boliviano durante varios tramos entre Desaguadero y La Paz. El piloto terminó la prueba en la casilla 23 (3:32:20), y sube al puesto 17 en la general.

Hasta el cierre de esta edición, los pilotos nacionales Rilver Vásquez y Luciano Pérez seguían en competencia, en el especial.

Bienvenida

La lluvia, el frío y las danzas fueron el plus de la “fiesta dakariana”

REDACCIÓN

El ingreso del Rally Dakar al país se presentó en medio de frío y lluvia durante todo el día. Sin embargo, de igual manera el público paceño y boliviano respondió a la “fiesta”, y se dio cita de manera normal, para apoyar no solamente a los representantes nacionales, sino también a los internacionales. 

Y es que otro de los condimentos de la jornada fueron las danzas típicas nacionales que hicieron, incluso, bailar a competidores foráneos.

Caporales, morenada y diablada, salay, chacarera, tinkus y taquirari, por mencionar algunos, fueron los ritmos que se presentaron en la rampa de bienvenida, en la que estuvo el presidente Evo Morales y el vicepresidente Álvaro García Linera.

El frío y la lluvia hicieron que los espectadores, durante todo el recorrido desde El Alto a La Paz, estén con ponchos y paraguas, pues nadie quería perderse el ingreso de las motos, cuadras, coches y los “mounstros” (camiones).

Se espera que mañana el público paceño despida de igual manera a los competidores.