MIS CIRCUNSTANCIAS
¡Juegos Suramericanos espectaculares!
29 de noviembre de 2017 (21:10 h.)
Concluyeron los Juegos Bolivarianos de Santa Marta, Colombia, que marcan el inicio del ciclo cuatrienal que prosigue en 2018 con los Suramericanos a realizarse en Cochabamba, Bolivia, del 26 de mayo al 8 de junio del 2018. Después vienen los Panamericanos de Lima, Perú, en 2019, finalizando con los Juegos Olímpicos del 2020 en Tokio, Japón.
Obligación moral ineludible, para quienes tenemos oportunidad de expresar nuestra opinión públicamente, es ajustarnos a la verdad, sin tapujos ni remilgos. Por eso, debo reiterar que, en los Juegos Suramericanos Cochabamba 2018, seremos espectadores, y nuestros deportistas, difícilmente y con excepciones notables, disputarán medallas.
La revisión del medallero histórico y la falta de oportuna preparación de los candidatos a representarnos respaldan esta dolorosa pero realista afirmación. Fuimos retrocediendo como el cangrejo, desde 1990 cuando Bolivia sumó 35 medallas, 2 doradas, 9 plateadas y 24 bronceadas, hasta el patético registro de 4 medallas de bronce, en los Juegos Suramericanos de 2014 realizados en Santiago de Chile.
Por eso, nuestra visión o actitud pragmática aconseja prepararnos para ser espectadores, directamente en los escenarios o por los medios de comunicación, en unos Juegos de alto nivel por la participación de deportistas de élite de Brasil, Argentina, Colombia, Venezuela, Chile, Ecuador, Uruguay, Paraguay, Perú, Surinam, Panamá, Guyana y Aruba.
Sin duda que veremos y apoyaremos el esfuerzo individual de nuestros aguerridos deportistas, que seguramente se esforzarán al máximo para mejorar el medallero boliviano, pero no exijamos demasiado ni critiquemos las limitaciones. No son atribuibles a ellos, sino a la falta de inversión conveniente en su preparación.
Solo faltan seis meses para la fiesta deportiva que será espectacular e inolvidable, con la presencia de miles de visitantes, entre deportistas, entrenadores, dirigentes, periodistas y turistas. Cochabamba toda debe prepararse para brindarles su hospitalidad a nombre de los bolivianos.
Preparemos nuestra mejor energía con la ilusión de que, a partir de estos Juegos, con escenarios nuevos y otros refaccionados, la nueva generación tendrá posibilidad de mejorar su nivel competitivo en el deporte internacional.
Obligación moral ineludible, para quienes tenemos oportunidad de expresar nuestra opinión públicamente, es ajustarnos a la verdad, sin tapujos ni remilgos. Por eso, debo reiterar que, en los Juegos Suramericanos Cochabamba 2018, seremos espectadores, y nuestros deportistas, difícilmente y con excepciones notables, disputarán medallas.
La revisión del medallero histórico y la falta de oportuna preparación de los candidatos a representarnos respaldan esta dolorosa pero realista afirmación. Fuimos retrocediendo como el cangrejo, desde 1990 cuando Bolivia sumó 35 medallas, 2 doradas, 9 plateadas y 24 bronceadas, hasta el patético registro de 4 medallas de bronce, en los Juegos Suramericanos de 2014 realizados en Santiago de Chile.
Por eso, nuestra visión o actitud pragmática aconseja prepararnos para ser espectadores, directamente en los escenarios o por los medios de comunicación, en unos Juegos de alto nivel por la participación de deportistas de élite de Brasil, Argentina, Colombia, Venezuela, Chile, Ecuador, Uruguay, Paraguay, Perú, Surinam, Panamá, Guyana y Aruba.
Sin duda que veremos y apoyaremos el esfuerzo individual de nuestros aguerridos deportistas, que seguramente se esforzarán al máximo para mejorar el medallero boliviano, pero no exijamos demasiado ni critiquemos las limitaciones. No son atribuibles a ellos, sino a la falta de inversión conveniente en su preparación.
Solo faltan seis meses para la fiesta deportiva que será espectacular e inolvidable, con la presencia de miles de visitantes, entre deportistas, entrenadores, dirigentes, periodistas y turistas. Cochabamba toda debe prepararse para brindarles su hospitalidad a nombre de los bolivianos.
Preparemos nuestra mejor energía con la ilusión de que, a partir de estos Juegos, con escenarios nuevos y otros refaccionados, la nueva generación tendrá posibilidad de mejorar su nivel competitivo en el deporte internacional.