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  • Diario Digital | jueves, 28 de marzo de 2024
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EL OJO DEL PUEBLO

Corredores de integración

Corredores de integración
Para recordar, Fernando Henrique Cardoso, expresidente de Brasil, planteó, a fines de los años 90, la creación de los corredores de integración. Entonces, se organizó IIRSA o Iniciativa para la Integración de la Infraestructura Regional Suramericana. Los proyectos de infraestructura comprenden la construcción y mejoramiento de carreteras, ferrovías, oleoductos, gasoductos, tendidos eléctricos, hidrovías, puertos, aeropuertos, represas, centrales hidroeléctricas y otros con relación a transportes y energía.

12 países se reunieron en Brasilia, el 1 de septiembre del 2000: Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Guyana, Paraguay, Perú, Suriname, Uruguay y Venezuela. Después de 17 años, su avance aún es muy lento.

Este proyecto estructurado permitiría la conexión central de Suramérica, uniendo Brasil, Chile, Perú y Bolivia, posibilitando el intercambio comercial entre estos países y la posible exportación a los mercados de ultramar. El Corredor Ferroviario Bioceánico Central articula redes férreas desde el puerto de Santos (Brasil) hasta el Puerto de Arica (Chile), con una longitud de 4.000 kilómetros. El tramo boliviano es crítico. En la actualidad, las dos redes ferroviarias, Andina y Oriental, no están interconectadas, generando un eslabón faltante equivalente al 6 por ciento del total de la longitud del Corredor Ferroviario Bioceánico Central, en una longitud aproximada de 500 kilómetros. La trocha de las dos redes ferroviarias es métrica, la capacidad portante es de 15-18 toneladas por eje, y tendrá una velocidad de 70 kilómetros por hora (pasajeros) y 40 (carga).

La visión del IIRSA para su financiamiento es pública – privada. Se estima en 7.000 millones de dólares. El proyecto está con estudios de preinversión, se prevé finalizarlo el año 2024.

En cuanto al Corredor Central por carretera, su avance es más importante. En nuestro país, están consolidados los tramos Oruro - La Paz- Arica - Ilo, y de Puerto Suárez a Santa Cruz.

El tramo carretero Santa CruzCochabamba – Oruro, de 650 kilómetros, es similar al ferrocarril. Su avance es lento, con una dificultad muy grande, principalmente desde Cochabamba hasta Villa Tunari (200 kilómetros), donde está el problema aún sin solución del tramo El Sillar, de 28 kilómetros, que es de gran complejidad. La solución pasa por desviar la carretera por el camino antiguo al Trópico, utilizado hasta 1973. La ABC (Administradora Boliviana de Carreteras) ha contratado por 440 millones de dólares a una empresa china. Esta empezó hace dos años y aún no cuenta con un proyecto solución. En realidad, hay 100 kilómetros en mal estado (...).