Los más nuevos aviones de la Fuerza Aérea Israelí (IAF, por sus siglas en inglés) están listos para el combate, informó la compañía de defensa estadounidense Lockheed Martin en un comunicado.
Se trata de las aeronaves de combate Stealth F-35, que están completamente operativas, indica el portal de Times of Israel. Hace menos de un año el país comenzó a recibir las primeras unidades.
El jefe de la Fuerza Aérea, general de división Amikam Norkin, dijo que estos aviones le dan a Israel la capacidad de afrontar los "desafíos complejos y en constante evolución" del Medio Oriente, detalla ese mismo medio.
El anuncio coincide con la decisión del gobierno norteamericano de trasladar su embajada de Tel Aviv a Jerusalén, pese a las advertencias de líderes mundiales y de la propia Unión Europea, que consideran ese movimiento como una amenaza al proceso de paz.

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El primer F-35 llegó a Israel a finales de diciembre del año pasado. Desde entonces, la IAF ha realizado pruebas a los equipos y entrenando pilotos para manejar la aeronave, elogiada por su capacidad de interconexión y potencialidad ofensiva.
Cada uno de estos aparatos costó unos 100 millones de dólares, un precio que ha sido considerado demasiado alto para una aeronave de ese tipo. Los detractores también han criticado el lento proceso de entrega y producción.
Hasta ahora, Israel tiene 9 unidades en operaciones, pero la flota total constará de 50 aviones en 2024, informó el ministerio de Defensa. Los cazas son operados por el Escuadrón ´Golden Eagle´ de la IAF, cuya base se encuentra en el centro de ese país.
Anualmente, Israel recibe unos 3,8 millones de dólares en ayuda militar de EE.UU. Sin embargo, la casi totalidad de ese monto debe ser destinada a compras a proveedores norteamericanos. En septiembre del año pasado, aún con Barack Obama en la Casa Blanca, Washington se comprometió a ampliar la cooperación a 38.000 millones de dólares en el período 2018-2028.