Un muro de contención improvisado, una casa sin pilares y la lluvia persistente derivaron en el derrumbe de una pared que aplastó a los hermanos Leonel Angelo Campos Orihuela (5) y Yerald Joel Espinoza Orihuela (2), quienes fueron, la madrugada de ayer, víctimas mortales de la tragedia en Villa 1 de Mayo, en el sur de la ciudad de Cochabamba.

Las viviendas en la zona 5 - Bustillo, en el Distrito 9 “sin ilegales” y no se puede intervenir con obras ahí, según explicó el subalcalde de la comuna Itocta, Gabriel Rocha.

Pasada la medianoche, los niños estaban en una cama viendo el televisor que estaba al mismo lado de la pared que, de repente, se les vino encima.

La mamá, Cinthya Orihuela, relató que cayó la pared y entró mazamorra y piedra. “Fue todo rápido, No pude salvar a mis niños. Mi mamá se atascó con la piedra. Salí a pedir ayuda a los vecinos, grité. Sacaron a mi mamá; también a mis hijos, ya sin vida”. Recordó sin aún comprender la tragedia, mientras sus dos hijos yacían en cajones blancos en la tercera planta del mercado de Villa 1 de Mayo, donde se instaló ayer el velorio.

En el cuarto también estaba la tía de los pequeños, Verónica, quien contó que ellas estaban más atrás y les dio tiempo para salir, solo con rasguños.

Calixto Flores salió cuando le llamó su vecino.

“Me dijeron que los niños estaban muertos. No podíamos ubicarlos, estaban tapados con lodo y piedras. Hemos trabajado con linternas, no había luz”.

Todavía con frío, porque la lluvia continuó en la mañana, este vecino ayudó a recuperar, de entre el barro, bienes de la familia. Junto a personal de la Alcaldía de Cochabamba, los vecinos trasladaron objetos a otro cuarto.

Esta vez, hubo víctimas mortales. Pero, los vecinos contaron que los daños a las construcciones ocurren cada año.

Flores dijo que en 2016 hubo casas donde entró el lodo, incluida la suya. Explicó que la gente se cuida en la medida de sus posibilidades. “Los vecinos han hecho los muros de contención, como han podido, porque dijeron que iban a empedrar”.

Otra vecina, Teófila Quispe, expresó que su calle se convirtió en un río. “Siempre es así”.

Varios se reunieron cerca de la casa afectada, lamentaron las muertes y pidieron atención de las autoridades. También reconocieron que “solo cuentan con minutas” y no con documentos que acrediten la propiedad de terrenos.

El Subalcalde dijo que los loteadores hacen “uso y abuso” de los terrenos.

“Las casas no están aprobadas por el Municipio. Tal vez, por los escasos recursos, buscan adquirir terrenos a menor costo. Pero, deben pensar que esas son las consecuencias (…) Son ilegales”.

El suelo todavía parecía ceder con la humedad y por los riachuelos que se formaban entre las casas y algunos callejones y calles.

El jefe del Departamento de Gestión de Riesgos de la Alcaldía de Cochabamba, Daniel Rodríguez, explicó que no es una zona inestable, tampoco hay una torrentera cerca.

“Son las construcciones improvisadas, no hay muros de contención ni hay hormigón armado. Tampoco veo columnas”.

La pared cayó en un área baja y de intersección de vías. “No hay muros de contención. Son acopios de piedras intentando estabilizar su talud. Pero ha fallado”.

La emergencia

La zona con la mayor emergencia por lluvias fue ayer Villa 1 de Mayo, en el sur de la ciudad. Está situada en un cerro que se ve desde Albarrancho.

Lodo y agua inundan un colegio al que le falta muro

El lodo y agua inundaron ayer aulas y el patio del colegio 1 de Mayo.

Las clases ya terminaron en la unidad educativa que funciona en dos turnos y acoge a alrededor de 1.500 estudiantes. Sin embargo, la junta escolar estuvo ahí para reclamar por la falta de atención.

Las ventanas de la parte posterior del colegio tienen maderas, como una forma de prevenir la afectación en época de lluvias. En ese sector no existe muro perimetral, la calle está más alta que el nivel del suelo del colegio y desde ahí ingresa el agua.

El representantes de los padres de familia, Rubén Gutiérrez, cuestionó que los argumentos sean “el recorte presupuestario que sufre la Alcaldía”.

Aclaró que no solo se trata de un muro sino de una obra de contención.

Agregó que son necesarias otras refacciones, porque la unidad educativa “tiene rajaduras”.

Personal de la Alcaldía realizó la limpieza desde la madrugada de ayer.