Siete estudiantes (de entre 16 y 17 años) de un colegio del centro de Cercado denunciaron ayer que fueron víctimas de acoso sexual, mensajes inapropiados, invitaciones a salir a consumir bebidas alcohólicas e incluso envío de contenido pornográfico por parte del psicólogo del centro educativo.

El director de la unidad educativa desacreditó la denuncia de las alumnas, alegando que se podría tratar de un acoso verbal malinterpretado. "Nosotros no hemos visto nada, solo indicios", declaró.

El responsable del colegio explicó que el psicólogo ingresó este año a trabajar gratuitamente, a través de un convenio con la Universidad Privada del Valle (Univalle). Manifestó que los padres de familia y estudiantes exigieron el despido de esta persona, pero el director no accedió. "Yo no puedo suspender a alguien por indicios", sostuvo.

Una de las estudiantes afirmó que ella recibió constantes invitaciones a la oficina del consejero y para salir. Describió que él le pedía que le tuviera confianza y que un día ella accedió a ir a su oficina para hablar de sus problemas.

"Me invitó a su oficina, me decía ‘acércate, no va a pasar nada que tú no quieras’. Yo le dije no gracias, estoy bien aquí. Él me dijo ‘creo que te estás retractando, pensé que viniste aquí con un propósito. Yo entendí que entre nosotros se podía dar algo más", narró la estudiante.

Con la voz quebrada, la muchacha relató que tras rechazar la proposición, el consejero la retuvo en su oficina. "Por favor me quiero ir, le dije. Antes de dejarme salir me hizo prometer que no diría nada a nadie", testimonió.

Otra de las denunciantes, que actualmente se encuentra en la prepromoción, reveló: "Yo tenía una presentación al teatro Adela Zamudio y el psicólogo estaba de maestro de ceremonias. Antes del evento me preguntó: ‘¿Con qué vas a venir esta noche?’ Yo le dije no sé, me dijo ‘quiero que me des el gusto de verte en minifalda".

La colegiala dijo que el denunciado le insinuó que podían salir a tomar algo o "a un lugar más tranquilo".

"Le dije que no, que mis papás iban a ir a recogerme", comentó.

Las denunciantes expresaron preocupación por sus compañeras más pequeñas, a quienes identificaron como posibles víctimas.

"Ya es el colmo, el director no quiere hacer nada, lo defiende. Nos prohibió buscar a las otras chicas que acudían a consulta, hay niñas de primero que iban”, protestó una de las menores.

Las denunciantes coincidieron en que el consejero les pedía discreción. El amedrentamiento y el miedo a las represalias hicieron que no supieran de la existencia de otras víctimas.

Una de ellas indicó que el denunciado le dijo:"No puedes contarle a nadie, ni a tu mamá, porque puedes arruinarme y a mi carrera".