El secretario ejecutivo de Futbolistas Agremiados de Bolivia (FABOL), David Paniagua, retiró su amenaza de parar el torneo Clausura y dio “luz verde” para disputar el certamen este fin de semana.

El representante de los jugadores en el país logró firmar un compromiso con los dirigentes del balompié nacional y resolver los problemas económicos que tienen los diferentes clubes.

“Sí, se juega la Liga este fin de semana. En la reunión con los dirigentes de la Liga buscamos que los compromisos económicos se cumplan. Además, las otras demandas nuestras lo han entendido”, declaró Paniagua, tras culminar el Consejo Superior.

Paniagua hizo referencia, además de las deudas económicas, a la redacción del contrato modelo único, la reestructuración de la Cámara de Resolución y Disputas que “ha quedado desfasada” frente a la nueva Ley del Deporte, el seguro médico para los futbolistas y la paridad, de los estatutos de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF).

“El acuerdo (económico) primero lo haremos conocer a los jugadores, ya tenemos la certidumbre que ese compromiso se lo va a cumplir con la garantía real comprometida”, explicó Paniagua.

Los otros puntos mencionados serán debatidos en una reunión del Comité Ejecutivo de la FBF, programado para el 13 de diciembre, en Cochabamba.

El presidente de la Liga Profesional, Carlos Ribera agregó que: “Está garantizado el fútbol para el fin de semana y los dirigentes deberán cumplir con sus compromisos. Además, deben ser más cuidadosos al momento de firmar los contratos para armar sus planteles”.

En el Consejo también hubo una reunión con el representante de la empresa que tiene los derechos de televisación, José Quiroga, quien compareció ante los clubes para atender las exigencias de los ingresos económicos.

“Quedamos sorprendidos cuando declaran que analizarán la rescisión del contrato, cuando hace poco ellos son los que nos solicitan dinero para pagar sus deudas y eso provocó nuestra molestia y aclaramos las cosas”, declaró Quiroga.

El empresario presentó la documentación a los clubes, pese a que se tratan de papeles privados, para desvirtuar que su entidad se lleva la mayor parte de las ganancias como acusaron algunos dirigentes, en la semana.

“Nuestros márgenes de ganancias son limitados, nos interesa el fútbol boliviano, pero en la medida que haya formalidad. En su afán por ganar campeonatos, contratan jugadores y entrenadores que luego no pueden pagarles”, dijo Quiroga.

Según los dirigentes del balompié nacional, “el fútbol está inflacionado” y esperan que esta situación se pueda frenar para evitar “hipotecar” los clubes y poner en riesgo su patrimonio, como ya sucedió con Blooming y San José.

Doping

El titular de la Liga, Carlos Ribera, explicó que se tratan de dos casos de doping, pero no dio los nombres de los jugadores ni de los clubes.