El pasado 10 de noviembre se anunció que la escritora cochabambina Carolina Maldonado resultó ganadora de la última edición del Premio Nacional de Literatura Infantil, el más importante en este género en el país. OPINIÓN se contactó con Maldonado para conversar sobre literatura infantil.

P. Coméntanos lo básico sobre el libro.

R. El libro se llama "Ismael y la Ciudad de los Dragones". Cuenta la historia de un niño, Ismael, que recibe un legado de su abuelo, quien a su vez lo recibió a través de muchas generaciones, y que tiene que ver con la supervivencia de esta ciudad mágica. Bueno, más que mágica, ciudad de dragones.

P. ¿Hace cuánto escribes literatura infantil?

R. Mi primera obra fue "Pedro y Chana. Una aventura en la selva". Y con esa gané el XIII Concurso Nacional de Literatura Santa Cruz de la Sierra", en 2011.

P. ¿Cómo es la escritura para un público como el infantil?

R. Creo que, en primer lugar, no debemos subestimar a los niños como lectores. Ellos son un público muy exigente. Si la lectura no los agarra de principio, difícilmente acabarán de leer una obra, lo que hace que la escritura deba ser entretenida, fascinante y llena de suspenso. Debe tocar temas que son significativos para ellos, y tocarlos con profundidad. Todo esto con un lenguaje simple. Y con simple no me refiero a un lenguaje "fácil", sino que sea fluido y transparente, lleno de imágenes y de conceptos claros. Debe ser una escritura que los desafíe mentalmente y los toque emocionalmente.

P. ¿Qué importancia crees que tiene el desarrollo de un hábito lector desde temprana edad?

R. ¡Tremenda importancia! Los beneficios de la lectura son infinitos. Los niños explotan su imaginación, incrementan su creatividad, amplían su horizonte de conocimiento, se familiarizan con nuevas culturas, ideas, etc.

P. ¿Escribes también para otro público? ¿Cómo te inclinaste por este género?

R. Ahora me dedico de lleno a la literatura infantil. Me decidí por este género cuando fui mamá por primera vez. Mis tres wawitas han sido la inspiración y motivación para escribir por y para ellos.

P. Tu formación es en Literatura. ¿Cómo incidió el estudio de esta carrera en tu vocación de escritura?

R. Bueno, desde niña me gustaba mucho escribir. En el colegio tuve la fortuna de tener una profesora que nos impulsó mucho en esta actividad (estudié en el Laredo). Así que al salir bachiller quise estudiar algo que me ayudara a profundizar y mejorar mi escritura. Me fui a La Paz y adoré la Carrera de Literatura. Me enseñó a leer y a escribir, desde el sentido más básico, porque lamentablemente, en general, salimos del colegio con un nivel de lectura y escritura muy bajos, hasta un sentido mucho más profundo. Aprendí a leer, desmenuzar el texto, generar múltiples sentidos, deleitarte en lo que lees, escribir responsable y coherentemente, poder expresar al mundo lo que crees y lo que creas, lo que te gusta o disgusta; lo que eres y lo que no.

Creo que estudiar me dio muchas herramientas para abordar la literatura infantil con la seriedad que se merece.

P. ¿Cómo encuentras la relación con tus lectores, su reacción a tus libros?

R. Mis primeros lectores y críticos son siempre mis hijos. Mi esposo les lee todo lo que yo escribo, y cuando no se duermen o cuando al día siguiente recuerdan muy bien dónde se quedaron, es una buena señal. He tenido lindas experiencias con niños que me han dicho que les ha gustado uno de mis libros, o con padres que me dicen que tal o cual cuento es el favorito de sus hijos y que se lo leen cada noche. Es muy reconfortante saberlo.