Las exportaciones no dejan de caer. Las cifras hablan por sí solas y, ciertamente, preocupan, sobre todo al sector exportador. Según datos del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), el valor en ventas de las exportaciones de enero a septiembre de este año sumó 5.798 millones de dólares. La cifra es un poco superior a la registrada en el mismo periodo de 2016, cuando se comercializaron productos por 5.323 millones de dólares, pero es considerablemente inferior a la de 2015 (6.784 millones de dólares) y a la de 2014 (10.043 millones de dólares).

Estos montos revelan que las ventas de productos bolivianos en el mercado internacional no están pasando por su mejor momento.

Si de volumen se trata, este también cayó en los últimos años. Según el mismo informe, entre enero y septiembre de 2014, se exportaron productos que llegaron a sumar 21.769 millones de kilos, mientras que, en el mismo periodo de este año, solo se alcanzó a enviar a los mercados internacionales 18.343 millones de kilos.

Ambos indicadores preocupan al sector exportador boliviano, que siente que se deben asumir acciones estratégicas para revertir esta caída en el corto plazo.

Ese tema precisamente será abordado este jueves, en la población de Riberalta, en el noreste del país, cuando la Cámara Nacional de Exportadores (CANEB) se reúna en el Encuentro Nacional de Exportadores (ENEX 2017).

“Los exportadores nos vamos a encontrar para asumir el desarrollo del país, proponer ideas y herramientas para que las exportaciones se incrementen. Sobre todo, queremos llamar la atención sobre el rol estratégico de las exportaciones en la economía y el desarrollo, en particular en un contexto adverso para la economía boliviana”, señaló el presidente del CANEB, Wilfredo Rojo, según reflejó el diario La Razón.

A más de ver qué acciones se asumen, los empresarios que apostaron por comercializar los productos bolivianos en el mercado externo tratarán otros temas que, de alguna manera, les impiden aumentar el volumen y valor exportable. Uno de ellos precisamente será la desburocratización, además de las trabas que existen para llegar a los mercados, la devolución impositiva y la reapertura de mercados, entre otros.

El tema de la devolución impositiva es un reclamo recurrente en el sector. Con el tiempo, no ha cambiado.

En octubre de 2016, por ejemplo, el sector reclamaba por el rezago de tres años que llevaba el Servicio de Impuestos Nacionales (SIN) en las devoluciones impositivas.

En esa oportunidad, según reflejó la agencia de noticias ANF, la CANEB aseguraba que el verdadero problema estaba en el Servicio de Impuestos Nacionales (SIN), que tenía un rezago de tres años en la ejecución del Cedeim; es decir, que una solicitud de devolución de impuestos presentada al SIN en 2012 recién se hizo efectiva en 2015.

Urge que el Gobierno tome en cuenta las demandas de los exportadores para que juntos diseñen una estrategia que permita superar estos percances y revertir el mal momento que pasan los productos de exportación, sobre todo los no tradicionales, que no solo generan divisas para el país, sino empleos para los bolivianos.

Uno de los objetivos de ENEX 2017, según ANF, será también compartir las experiencias de representantes de entidades de apoyo al exportador, de países vecinos.

En ese marco, la Cámara Nacional de Exportadores ha anunciado la presencia de representantes de la Organización de Comercio Exterior de Japón (JETRO); de la Asociación de Exportadores de Guatemala (Agexport); de la compañía en soluciones informáticas Crimsonlogic, que desarrolló el sistema que integra a los puertos de Singapur, Panamá y Estados Unidos; del Gobierno de Rondonia de Brasil; y de la Ventanilla Única de Comercio Exterior (VUCE) de Paraguay y Colombia.