"Ayer hemos logrado aprenderla y la hemos aprendido en poder de 2000 bolivianos  que estaban en una cartera de bolsillo. Esta gente en compañía de cuatro personas  se encontraba agrediendo con violencia a otra, con la finalidad de ejercer robo agravado", dijo Aguilera.  

La "Tyson" tenía a su cargo 15 personas consumidoras de drogas,  a quienes les pagaba con sustancias ilícitas, con los denominadas "papa",  para que cometan los hechos delictivos.

Operan entre cuatro personas, rodeaban a la victima  causándoles lesiones con armas punzocortantes (destornilladores y navajas) para robarles sus pertenencias  (celulares, billeteras  y carteras).

Los documentos robados fueron utilizados para la obtención de créditos e hipotecas falsas vinculadas al patrimonio. Los delitos fueron tipificados como robo de identidad y  falsedad material. 

La líder de la pandilla pretendió  sobornar a la policía ofreciendo dinero para evitar que su hijo de 17 años sea involucrado  en el grupo.

"Quiso sobornar a la policía con los 2000, se comprometió a atraer más dinero para evitar que su hijo de 17 años sea involucrado en la red", apuntó Aguilera.

El hijo de 17 años de la "Tyson"  también tiene antecedentes penales, estuvo detenido en el cetro de rehabilitación Calahuma donde robo una computadora. Posteriormente fue trasladado a la cárcel de San Pedro donde  quemó a un reo, hoy tiene 18 años.