SERENDIPIA
Doble pago y cero respuestas
03 de noviembre de 2017 (19:13 h.)
Las últimas semanas nos han bombardeado hasta el cansancio en primeras planas y llenando titulares con noticias del desfalco de un banco estatal. Supimos desde la “insignificancia” del hecho, cambio de gerente, brujos cómplices de por medio, hasta la detención de más de 20 personas, entre familiares y funcionarios.
Y para colmo, hoy elegí hablarles también de una institución financiera, y es que las penurias en cuestión están relacionadas con un banco. No el del desfalco en cuestión, sino un privado que goza de prestigio.
Les narro la experiencia. A efectos de trámites administrativos, una persona solicita un estado de cuenta a un banco, a fin de que con ese documento se pueda corroborar su solvencia económica.
Luego de pagar la certificación correspondiente en el banco, la persona acude a la oficina del trámite y presenta el documento. La persona al otro lado de la ventanilla pregunta: “Disculpe, señor, ¿en qué moneda es su cuenta bancaria? Acá no dice”. El sujeto le indica: “No puede ser, debe estar en algún lado, es una certificación oficial del banco”. La señora que le atiende amablemente dice: “Por favor, ayúdeme a ver dónde está el tipo de moneda”. El ingenuo mira por arriba y por abajo; revisa línea por línea y, evidentemente, el certificado no contiene el tipo de moneda de la cuenta bancaria. Le rechazan el trámite y le solicitan esa aclaración.
Inmediatamente vuelve al banco a solicitar explicaciones y ayuda para resolver el contratiempo. En “Atención al cliente” le indican: “Las cuentas son un producto”. Sí, así, muy a tono marketero, y como si fuera gran cosa. Su denominativo es “Rendimax” y por eso no incluyen el tipo de moneda. El sujeto mira a los ojos de su interlocutora y le dice: “¿Ustedes emiten una certificación de cuentas que solo incluye un número, sin decir el tipo de moneda que es?”. “Sí, señor”, responde la funcionaria. “¿Cómo me puede ayudar? Estoy en pleno trámite”. Esto último no tiene respuesta.
El jefe Operativo de la oficina bancaria, ante el insólito trato de la anterior funcionaria, indica: “Bueno, podemos solicitar una excepción, pero eso demora. La única opción es que usted solicite una nueva certificación, y eso tiene otro costo”. Como no hay otra posibilidad, el sujeto accede.
Sin comentarios.
Y para colmo, hoy elegí hablarles también de una institución financiera, y es que las penurias en cuestión están relacionadas con un banco. No el del desfalco en cuestión, sino un privado que goza de prestigio.
Les narro la experiencia. A efectos de trámites administrativos, una persona solicita un estado de cuenta a un banco, a fin de que con ese documento se pueda corroborar su solvencia económica.
Luego de pagar la certificación correspondiente en el banco, la persona acude a la oficina del trámite y presenta el documento. La persona al otro lado de la ventanilla pregunta: “Disculpe, señor, ¿en qué moneda es su cuenta bancaria? Acá no dice”. El sujeto le indica: “No puede ser, debe estar en algún lado, es una certificación oficial del banco”. La señora que le atiende amablemente dice: “Por favor, ayúdeme a ver dónde está el tipo de moneda”. El ingenuo mira por arriba y por abajo; revisa línea por línea y, evidentemente, el certificado no contiene el tipo de moneda de la cuenta bancaria. Le rechazan el trámite y le solicitan esa aclaración.
Inmediatamente vuelve al banco a solicitar explicaciones y ayuda para resolver el contratiempo. En “Atención al cliente” le indican: “Las cuentas son un producto”. Sí, así, muy a tono marketero, y como si fuera gran cosa. Su denominativo es “Rendimax” y por eso no incluyen el tipo de moneda. El sujeto mira a los ojos de su interlocutora y le dice: “¿Ustedes emiten una certificación de cuentas que solo incluye un número, sin decir el tipo de moneda que es?”. “Sí, señor”, responde la funcionaria. “¿Cómo me puede ayudar? Estoy en pleno trámite”. Esto último no tiene respuesta.
El jefe Operativo de la oficina bancaria, ante el insólito trato de la anterior funcionaria, indica: “Bueno, podemos solicitar una excepción, pero eso demora. La única opción es que usted solicite una nueva certificación, y eso tiene otro costo”. Como no hay otra posibilidad, el sujeto accede.
Sin comentarios.