Opinión Bolivia

  • Diario Digital | jueves, 28 de marzo de 2024
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DESDE LA ACADEMIA

Qué viene en La Haya

Qué viene en La Haya
Converge una pluralidad de interrogantes para conocer lo que está aconteciendo en la demanda marítima. ¿Ahora qué viene? En septiembre, el Estado chileno presentó la dúplica escrita a la memoria boliviana, hecho que marcó notoria trascendencia, ya que da por inicio a la instancia oral de la controversia. El Estatuto de la Corte en su artículo 43 así lo instituye.

La misión boliviana, que se ausentó recientemente a La Haya, encabezada por el Canciller, se encontró con un Tribunal en proceso de transición, esto debido a que varios jueces cumplieron con su mandato de nueve años, cinco de ellos para ser preciso, por lo que corresponde esperar la nueva conformación de los 15 magistrados, quienes se servirán dar curso a las defensas orales, que usualmente duran entre dos a tres semanas.

Por lo que se conoce, el Tribunal probablemente notifique a las partes en enero o febrero del próximo año, motivo por el cual toca ahora, al equipo jurídico y a la comisión de Gobierno de nuestro país, examinar al unísono la dúplica del Estado chileno, misma que contiene tres elementos sustanciales circunscritos en la intangibilidad del Tratado de 1904, en la consistencia de que no existe obligación alguna para negociar y en la postura de que este caso no radica en que Bolivia tenga como derecho el acceso soberano al mar.

Ciertamente, para Chile no ha sido simple elaborar la contestación, ya que la demanda boliviana adquirió un valioso desenlace en el contexto jurídico internacional, dado a que su matriz enraíza elementos altamente singulares para el International Law (derecho internacional). A tal efecto, el Centro de Estudiantes David Rockefeller y la Sociedad de Estudiantes Latinoamericanos de la Escuela de Gobierno de Harvard invitaron al expresidente Carlos Mesa para brindar una charla sobre el contenido de la demanda diseñada por Bolivia. Considero que solamente una ciega obcecación podría desmerecer este antecedente.

Aprovechando de paso este meritorio aporte para lo académico, valga la pena aclarar que muchas universidades están estudiando detenidamente los principios vectores que contiene la petición boliviana. Entre ellos, se localizan los actos unilaterales como fuentes del derecho internacional. ¡Qué importante es haber logrado clarificar un litigio que a un principio instauró confusión para propios y extraños! Discurro que hoy se está vislumbrando una línea más comprensible.

El epítome de esta secuencia se traduce en que tenemos hasta el 2018 para realizar una valoración seria de lo acontecido. En suma, se cuenta con una demanda apropiadamente estructurada. Se designó a Yves Daudet como juez ad hoc, docto en el campo del derecho Internacional, por lo que no sería sensato traer a colación el afán político que muchas veces causó desaciertos en esta línea de Estado planteada.