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  • Diario Digital | martes, 19 de marzo de 2024
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Nuestros inicios en la recuperación democrática

Nuestros inicios en la recuperación democrática
El periódico OPINIÓN, órgano de prensa de circulación nacional dependiente de la Cooperativa Boliviana de Cemento, Industrias y Servicios (COBOCE Ltda.), hizo su aparición el domingo 13 de enero de 1985. El país atravesaba entonces por un complejo proceso de transición de los regímenes autoritarios militares. Estos se instalaron en noviembre de 1964 con el general René Barrientos, período cuya duración se prolongó casi por dos décadas, hasta la reconquista de la democracia el 10 de octubre 1982, un día como hoy hace exactamente 35 años, con la ascensión al poder del presidente Hernán Siles del partido de izquierda UDP.

En los primeros años de la reinstalación democrática, se tuvo que superar los traumas que dejó el antiguo modelo autoritario que afectó todos los órdenes de la administración del Estado. Los resabios de tan prolongada permanencia dictatorial polarizaron las directrices de gestión gubernamental sustentadas en ultrismos de una y otra tendencia, abandonando la templanza que en esta coyuntural fase transitiva era necesaria para evitar el desborde general.

Por decisión del voto, en 1982 llegó nuevamente a la Presidencia, por segunda vez, Hernán Siles Zuazo, con una línea de Gobierno de corte socialista. No obstante, las debilidades de su gestión, especialmente la incapacidad que tuvo para remontar la difícil situación económica azotada por la hiperinflación, hicieron que en agosto de 1985 se celebren elecciones adelantadas, tras la renuncia de Siles Zuazo. Se consumó así el retorno al poder del viejo líder del MNR, Víctor Paz Estenssoro, quien asumió por cuarta vez el mandato democrático de la nación, tras su expulsión y exilio en el Perú, en 1964.

La intervención del MNR, entre 1985 y 1989, tuvo en Paz Estenssoro un líder sólido y respetado. Sin embargo, pese a su anterior figura de promotor de reivindicaciones populares que caracterizaron la Revolución de abril de 1952, en esta oportunidad lideró una corriente diametralmente opuesta. Su plan de Gobierno estuvo alineado a la nueva tendencia de vanguardia neoliberal, que inició un nuevo modelo. Si bien se detuvo la espiral inflacionaria y se logró la estabilización monetaria, también esta época fue origen de fenómenos sociales como la relocalización de los mineros, inicio de la privatización de las empresas del Estado y otras medidas que promovieron el reclamo de los sectores afectados a través de paros, bloqueos y marchas que en varias oportunidades convulsionaron al país.

Este fue el contexto —contradictorio, novedoso y agitado— que hizo de marco histórico a la emergencia de OPINIÓN, un medio inspirado en el movimiento cooperativista, cuyos principios básicos declaran conceptual y prácticamente la reivindicación de los derechos del hombre.

El primer editorial del diario, denominado “Nuestra misión” y escrito por el entonces director Edwin Tapia Frontanilla, abordó lo fundamental de la filosofía periodística del medio. “OPINIÓN es un órgano de prensa de la Cooperativa Boliviana de Cemento, por ello, su filosofía, su organización y su método de trabajo ya están inscritos en los documentos fundamentales del movimiento cooperativista boliviano. El cooperativismo propone restituir al hombre los derechos y prerrogativas que corresponden a su auténtica naturaleza humana. Consecuentemente, trabaja porque todos los medios y condiciones disponibles estén al servicio de esa finalidad. Proclama la validez de la razón para resolver los problemas y contradicciones que impiden el establecimiento de una sociedad justa y considerada, también que la violencia no es sino causa y efecto del viejo orden que se desea sustituir. En esa línea, OPINIÓN es una nueva estructura que contribuirá a la cultura del pueblo mediante la difusión de las noticias de cada día y de los avances de la filosofía, de la ciencia, del arte, de la técnica, con el mayor grado de entereza y autenticidad posibles”.