Sarita Maza, juez Mixto Público del municipio de San José de Santa Cruz, dispuso la detención domiciliaria para el exmilitar José A. P. T., acusado de entregar armas a una banda de atracadores que efectuó un asalto millonario a un vehículo blindado de la empresa Brinks. El Ministerio Público apeló esta resolución y anunció acciones penales contra la operadora de justicia.

“El Ministerio Público manifiesta su disconformidad con esta resolución infundada, a pesar que se demostró la probabilidad de autoría del sindicado, por lo que se tomarán las acciones penales correspondientes por prevaricato contra la autoridad jurisdiccional”, señaló el fiscal departamental de Santa Cruz, Freddy Larrea.

La Fiscalía procesó al acusado por los delitos de asociación delictuosa, portación ilícita de armas de fuego, lesiones graves y leves y robo agravado, toda vez que se asoció con los principales autores del atraco a Brinks.

Los fiscales del caso, José Parra y Carlos Robles, lamentaron que la jueza no haya dispuesto la detención preventiva para el acusado porque se presentaron suficientes elementos que demuestran la vinculación del exmilitar en este caso.

El Ministerio Público señala que uno de los detenidos preventivos, refiere que el exmilitar entregó el arsenal al grupo delincuencial que atracó el vehículo de Brinks en marzo de 2017, en la carretera al municipio de Puerto Quijarro. Además en un operativo en el domicilio de Pinto fueron secuestradas 27 armas (26 pistolas y 1 revólver), un fusil, tres miras telescópicas, tres cargadores (dos largos y un corto) y municiones de diferentes calibres, elementos que lo sindican en este caso.

Asalto millonario

El asalto a Brinks comprometió 2.6 millones de bolivianos y 350 mil dólares. Se desconocen detalles del dinero.