Opinión Bolivia

  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
  • Actualizado 13:26

ATRAPADOS EN REPÚBLICA DOMINICANA

Turistas bolivianos en el ojo de la tormenta María

El testimonio de connacionales que viajaron a Punta Cana, sin imaginar que el huracán María azotaría esa región.
Turistas bolivianos en el ojo de la tormenta María



“Ni en sueños pensé estar tan cerca de un huracán”. Árboles arrancados de raíz, postes de electricidad derribados, infraestructuras hoteleras dañadas, inundaciones y la sensación de no poder pararse establemente, ni siquiera en los pasillos del hotel, porque “sientes que el viento te arrastra”.

Así transcurrieron parte de las vacaciones que el boliviano Wilson Alcócer tomó con su familia en Punta Cana (República Dominicana), destino al que viajó sin imaginar que sería arrasado por el huracán María.

El ojo de esa tormenta tenía 18 kilómetros de ancho, equiparable a una gigantesca aspiradora que barre todo a su paso. Para fortuna de la familia Alcócer, cuando el huracán pasó por Punta Cana registró la categoría 3 en la escala de intensidad Saffir-Simpson. En otros países, alcanzó un máximo de cinco.

No obstante, a pesar del descenso en la intensidad, los compatriotas vivieron momentos de angustia porque, a pocos días de haber arribado a ese país, las autoridades ordenaron una evacuación. “Permanecimos 24 horas encerrados en la habitación del hotel”.

Así, aislados, escuchaban cómo la tormenta eléctrica y los vientos huracanados abatían la infraestructura hotelera. En el peor momento, incluso se interrumpieron los servicios de comunicación. En otros puntos de República Dominicana, un hombre de 32 años murió por un deslizamiento de tierra, otro falleció porque le cayó un árbol encima y uno desapareció. La familia Alcócer temía lo peor.

Así, encerrados, pensaban que la única manera de ponerse a buen recaudo era saliendo de ese país, una vez que la tormenta pase, pero su vuelo de regreso fue suspendido.

La incertidumbre volvió, “te sientes solo en este país. Impotente”, afirmó Alcócer a través de un contacto telefónico. Más días de permanencia no solo implican exponerse a fenómenos climatológicos sino también representan la erogación de más dinero. La familia tuvo que solicitar a parientes en Bolivia el envío de recursos económicos, debido a que ni siquiera el presupuesto extra que llevaron bastó para cubrir los días de hotel.

Wilson Alcócer indicó que la agencia de viajes no le dio ninguna advertencia antes del viaje. Recomendó a la población que evite ir a ese país entre agosto y noviembre, época de ciclones.

En espera

La familia Alcócer aún está en Punta Cana, aguardando el vuelo que los traerá de retorno a Bolivia. La aerolínea solo cubrió algunos días de su estadía adicional.