Si se pone a pensar usted acerca de por qué los mercados financieros son diferentes de los normales, hay un hecho profundo y fundamental sobre estos que ni una buena parte de la gente del sector financiero entiende. Y ese hecho tiene implicaciones que también sacuden los fundamentos de la macroeconomía moderna.

En palabras simples, en los mercados normales, las personas que saben exactamente lo que están negociando con frecuencia seguirán dispuestas a comerciar. En los mercados financieros, las personas que saben exactamente lo que están negociando casi nunca estarán dispuestas a comerciar. Para una explicación rápida, usemos lo que el experto Bradford De Long define: en una transacción económica estándar, no es ningún misterio dónde viene el valor a ambos lados. Cuando compro un café expreso por 20 bolivianos, el café es más valioso para mí que los 20 bolivianos. Y esa idea es una de las fuentes de las ganancias del comercio que es obvia. Pero en finanzas, ninguno de los dos lados está obteniendo productos útiles. Simplemente existe un cambio y ambas partes están negociando por una cifra para obtener a futuro otra cifra de dinero. ¿Cómo es que la venta de una cantidad de dinero que tengo en efectivo por otra a futuro puede ser una buena idea para las partes? ¿No es necesario que una de las cantidades sea más grande? ¿No es la persona que negocia la cantidad grande la que gana y la que negocia la más pequeña la que pierde?

Para ser claros, si le ofrezco venderle una acción de un valor cero, ¿por qué la compraría? Puede comprar porque desea, quién sabe, diversificar o ajustar su riqueza. Pero, seamos sinceros, las ocasiones en las que usted compraría ese tipo de producto financiero se darían porque usted pensaría que en algún momento en el futuro valdrá más que cero. Así que ahora pregúntese: si yo (el vendedor) también pienso que la acción valdrá más que cero en el futuro, ¿por qué se la vendería? Si alguien ofrece venderle una acción por cero y le dice que va a subir para arriba, en general no la compre. Porque si el tipo que te vende el activo realmente creyera en su propia predicción, mantendría el stock para él. La única vez que debe comprar la acción es cuando usted tiene buenas razones para creer que es más inteligente o está mejor informado que el tipo que está vendiendo. Mientras los mercados normales consisten en personas que hacen operaciones porque tienen diferentes preferencias, los financieros consisten en un grupo de personas con las mismas preferencias, todas tratando de engañarse mutuamente. Esto se llama el "Teorema del No-Comercio", y los economistas lo saben.