Opinión Bolivia

  • Diario Digital | sábado, 20 de abril de 2024
  • Actualizado 10:50

Mosquera vs Gallardo, un duelo aparte

El argentino y el peruano estarán frente a frente, de igual a igual en el Capriles.<BR>
Mosquera vs Gallardo, un duelo aparte



El destino futbolístico quiso ponerlos cara a cara por primera vez. Estarán de igual a igual porque la premisa es absolutamente la misma: salir a ganar, a comerse la cancha. De un lado, Marcelo Gallardo, el hombre de los cinco títulos internacionales con River Plate y que ya es considerado como uno de los entrenadores más exitosos del siglo XXI. Del otro, Roberto Mosquera, un peruano que pasó de ser resistido inicialmente en Wilstermann a ser abrazado de forma colectiva por la hinchada porque su método ha dado resultados y convenció.

Para el Muñeco Gallardo, de 41 años, el compromiso de hoy representa muchísimas cosas: quiere ser el principal testigo de que “River vuelva a ser River” y que recupere su mística mágica en un momento complicado y de adaptación por la inclusión de personajes nuevos en filas del plantel. Mosquera, que fue presentado como DT del Aviador en enero pasado, no ostenta un abanico de ases que resulten de conquistas al frente del Rojo. De hecho, aspira a lograr su primer laurel con la institución cochabambina. Sin embargo, conoce muy bien el funcionamiento de sus dirigidos y pasa un excelente momento tanto en el Clausura liguero como en la Libertadores de América. Además, sus principales impulsos, esos que lo empujan al frente, son su sed de gloria y la confianza que depositó en sus jugadores, aquellos que supieron responder a la altura de las exigencias cuando las apuestan externas no los tomaban en cuenta.

La diferencia de trayectoria entre Gallardo y Mosquera es amplia. Ciertamente, los número del Muñeco son apabullantes: En 18 años de carrera como jugador sumó 16 títulos entre torneos nacionales e internacionales, dirigiendo a cuatro clubes y una selección (Oro en Panamericanos y plata en Olímpicos).

Es la primera vez que ambos cotejarán fuerzas mediante sus mejores 11 cartas. El Muñeco tiene al delantero Ignacio Scocco. Mous no se queda atrás. Cuenta con el cruceño Gilbert Álvarez, un hombre que, a estas alturas del juego, ya es una de las fichas más queridas de Wilstermann.

En un segundísimo plano quedará el estilo de ropa que el incaico usa y que suele llamar la atención en cada compromiso por la Liga doméstica. Pesará lo meramente futbolístico.

Será un duelo singular (esperado tal vez por Mosquera) que trascenderá la riña protagonizada por los 22 actores que le darán vida hoy a una obra deportiva sobre la alfombra verde del Félix Capriles. Los guiones de los entrenadores, aunque diseñados con tácticas y estrategias distintas, comparten la esencia: ser apabullantes.