Opinión Bolivia

  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
  • Actualizado 00:24

FORO

Homicidios en Perú

Homicidios en Perú
Los datos sobre homicidios son, en principio, los menos imprecisos que reporta un país acerca de la situación del crimen. En el Perú, según los datos del Comité Estadístico Interinstitucional de la Criminalidad (CEIC), durante los últimos seis años hubo un aumento constante de la tasa de homicidios, que pasó de 5,4 por cada 100.000 habitantes en el 2011 (1.617 en total) a 7,7 en el 2016 (2.435 homicidios). Aun cuando los datos siguen ubicando al Perú en un grupo de países con tasas medias-bajas de homicidios en la región, es evidente que hay un aumento que permite plantear varias consideraciones.

La primera consideración es que hay cierta tensión entre el dato sobre victimización general, que reporta una tendencia descendente en los últimos años, y el de homicidios, que reporta mas bien lo opuesto. ¿Cómo entender la tendencia descendente de la victimización general y el aumento de los homicidios?

Quizá parte de la respuesta tenga que ver con dos consideraciones más. Por un lado, según los datos del Ministerio del Interior, se reporta un descenso en el número absoluto de homicidios asociados al crimen organizado en la comparación entre el 2013 y el 2016 (493 en el 2013, 506 en el 2014, 578 en el 2015, y 477 en el 2016). El año pasado, solo el 16,7 por ciento de los homicidios (según el CEIC) tuvo una relación clara con el crimen organizado.

Por otro lado, también en el 2016, cerca del 25 por ciento de los homicidios estuvo asociado a la “venganza” personal, 11 por ciento a los “celos”, 20 por ciento a la “delincuencia común” y 8 por ciento a la “violencia en estado de ebriedad”. De modo que el crimen organizado no es la primera causa, ni la explicación central del aumento de homicidios en los últimos años. Es decir, hoy hay más homicidios que hace seis años, pero hay menos homicidios cometidos por el crimen organizado.

Otra consideración es que resulta relevante el aumento del número absoluto de homicidios con armas de fuego, que ha pasado de 993 en el 2011 a 1.417 en el total del 2016 (aun cuando el porcentaje ha descendido de 61 por ciento a 58 por ciento en la distribución relativa). Este aumento en más de 400 muertes violentas al año con armas de fuego tiene una relación directa con el aumento de armas (sobre todo pequeñas de puño), tanto en el mercado ilegal como en el mercado legal a finales de la década pasada.

Finalmente, parece obvio que la concentración de homicidios está en las ciudades grandes (Lima reporta 648 homicidios en el 2016), que representa el 26 por ciento del total nacional de ese año, luego La Libertad con 175 homicidios.