Un accidente de tránsito ocurrido en el Circuito Bolivia, al sur de la ciudad, le permitió descubrir a la Policía que una joven había sido dopada y violada dentro de un taxi. Los sospechosos fueron aprehendidos y se verificó que uno de ellos ya tiene antecedentes por violencia sexual, según autoridades.

El director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) de Cochabamba, coronel Gualberto Díaz, informó que el caso se descubrió cuando un automóvil Toyota gris, con placa 538 YES, chocó en cercanías de la laguna Alalay. Una patrulla policial acudió a verificar si habían heridos, pero el chofer, al percatarse de ello, emprendió una fuga. Los efectivos persiguieron al carro hasta que lograron interceptarlo.

Al acercarse a la ventanilla, las autoridades descubrieron en el asiento trasero a una jovencita de 19 años dormida y semidesnuda. El vehículo tenía el letrero de taxi, aunque su placa era “hechiza” (no oficial). En el parabrisas llevaba una inscripción: “Dios es amor”. Sin embargo, la joven que estaba dopada en su interior podía asegurar que allí vivió la peor pesadilla de su vida.

Al recobrar el conocimiento, ella relató que fue a un local con unos amigos a comer y servirse una cerveza. Ella dice que luego de comer no recuerda nada más y no sabe cómo apareció en el taxi, en el que estaban su ropas y otras pertenencias.

Los dos hombres que estaban a bordo del taxi tienen 18 y 25 años. Investigadores de la FELCC confirmaron que el menor de ellos ya fue denunciado por violencia sexual en la Estación Policial Integral del Sur. De acuerdo al artículo 308 del Código Penal, la violación es un delito que se sanciona con una pena de 15 a 20 años de cárcel. Si la víctima fuera menor de edad, el castigo es de hasta 30 años de reclusión.

La pena

para el delito de violación sexual es de 15 a 20 años de cárcel según el artículo 308 del Código Penal boliviano.