La Vuelta a España iniciará, con el final en Alcossebre (Castellón), un tramo de la carrera en el que la tensión de los ciclistas irá en aumento y que puede provocar que más de uno termine diciendo adiós a sus aspiraciones de pelear por la victoria.

Todos los ciclistas saben que en los próximos días cualquier descuido que cometan puede terminar pagándolo muy caro en forma de segundos perdidos y, con ellos, de opciones.

Tras el vibrante final de Andorra la Vella, en el que aparecieron los primeros puertos de entidad de esta septuagésima segunda edición, el primer final en alto será el de la ermita de Santa Lucía castellonense.