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  • Diario Digital | jueves, 28 de marzo de 2024
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Madre de Dayana se encadena tras 80 “chicanas” de la defensa

Madre de Dayana se encadena tras 80 “chicanas” de la defensa



Ayer se reanudó el juicio oral por el feminicidio de la universitaria Lilian Dayana Galindo que fue asesinada con 34 puñaladas el 21 de septiembre de 2016. Sonia, la madre de Dayana, entró en crisis cuando la Fiscalía iba presentando las pruebas acumuladas en contra del exenamorado de su hija y los abogados defensores descargó una artillería de 80 incidentes y exclusiones probatorias, para intentar anularlas. Desesperada, Sonia salió de la audiencia y se encadenó a la puerta principal del Tribunal Departamental de Justicia de Cochabamba, exigiendo que las autoridades judiciales frenen “tanta chicanería”.

“Ya no puedo más. Con cualquier pretexto quieren alargar el juicio, todo se inventan. Antes querían que no le acusen de feminicidio, sino de homicidio. Ahora, todas las pruebas quieren hacer desaparecer. Basta. Quiero que le den 30 años de cárcel sin derecho a indulto. No le ha matado solo a mi hija. Yo estoy muerta en vida. Nos ha matado a las dos y no se arrepiente siquiera”, lloró la mujer, mientras cerraba el candado de una cadena que colocó alrededor de su cintura, de su hombro izquierdo, y sujetó a la verja del Tribunal de Justicia. La abogada Mercedes Cortez dijo que los abogados de la defensa de Rodolfo D.I. intentaron que las pruebas presentadas en su contra sean excluidas del juicio. “Un 95 por ciento , de las pruebas, fue objetado aduciendo defectos, ilegalidad en la obtención”, detalló. Ángela Nogales, del colectivo Mujeres de Fuego, dijo que enviaron cartas al Ministerio de Justicia y a la Defensoría del Pueblo en Cochabamba, para que envíen veedores a este juicio. Las protestas con pancartas y megáfonos del colectivo, frente al Tribunal, llamaron la atención de transeúntes y autoridades.

El 21 de septiembre de 2016, Dayana Galindo fue obligada a entrar a la habitación alquilada de su exenamorado Rodolfo, en la avenida Oquendo. Allí fue asesinada con 34 puñaladas y la prima de ella se topó con el acusado cuando este salía de la escena del crimen.