Santiago, la capital chilena, se vio afectada ayer por la mayor nevada de la última década, un fenómeno que dejó una persona muerta, dos heridas, más de 300 mil hogares sin suministro eléctrico. Los problemas se replicaron en las regiones de Valparaíso, O´Higgins y Maule.

Santiago amaneció cubierto por un manto blanco tras el intenso temporal de nieve que cayó durante la madrugada, una postal poco habitual para esta urbe de más de siete millones de habitantes. El intendente en funciones de la Región Metropolitana, Juan Pablo Gómez, informó que un trabajador del hospital Sótero del Río, en Santiago, falleció al resbalar sobre la nieve y golpearse la cabeza. Además, dos personas sufrieron descargas eléctricas en el barrio de La Florida al entrar en contacto con un cable que se cortó, pero están fuera de riesgo vital. Las nevadas fueron más fuertes en las zonas de la ciudades más cercanas a la cordillera de los Andes. En el barrio de Las Condes, la nieve derribó varios árboles y algunos autobuses quedaron varados en las calles. Según un informe de la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi), 316.200 hogares fueron afectados por un corte del suministro eléctrico en la Región Metropolitana, que incluye la capital. La eléctrica italiana Enel trabajaba ayer en el restablecimiento del suministro y ejecutaba un plan de contingencia. El paso Los Libertadores, complejo fronterizo entre Chile y Argentina, permanece cerrado como consecuencia del temporal. Además fueron suspendidos dos partidos de fútbol de la Copa Chile que debían disputarse en Santiago: el Colo Colo-Deportes La Serena y Universidad Católica-Rangers.