Opinión Bolivia

  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
  • Actualizado 22:24

Comunidad internacional alaba al Nobel Liu Xiaobo

Comunidad internacional alaba al Nobel Liu Xiaobo


La comunidad internacional ensalzó ayer la figura del disidente chino y Premio Nobel de la Paz Liu Xiaobo, fallecido ayer de cáncer bajo custodia policial y cuya muerte fue silenciada por el régimen de Pekín.

Escritor, maestro, poeta, intelectual, disidente, Liu (Changchun, provincia norteña de Jilin, 1955) tenía muchas facetas, pero murió siendo, por encima de todo, un alma libre: un ciudadano crítico, sin miedo o enemigos, a pesar de vivir bajo el yugo de un sistema autoritario. Liu, quien llevaba nueve años en prisión y de donde solo salió para ser hospitalizado dada la gravedad de su estado, falleció ayer a los 61 años en un hospital de la ciudad de Shengyang, tras sufrir un fallo multiorgánico a causa de un cáncer hepático, según informaron en un comunicado las autoridades judiciales de Shenyang.

La agencia oficial china Xinhua emitió un despacho sobre el fallecimiento de Liu, en el que omite la concesión del Nobel de la Paz en 2010 y en cambio lo define como un "convicto en 2009 de subversión al poder el Estado".

"La gestión del caso de Liu Xiaobo es parte de los asuntos internos de China, y los países extranjeros no están en posición de realizar comentarios inapropiados", manifiesta el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Geng Shuang. Liu fue condenado en 2009 a 11 años de cárcel por "incitar a la subversión" tras participar en la redacción de un manifiesto político que pedía reformas democráticas al régimen comunista, como la separación de poderes o la libertad de expresión.

Amigos de Liu Xiaobo y organizaciones de derechos humanos lamentaron el fallecimiento y criticaron al Gobierno chino por mantenerle bajo custodia policial en un hospital y no permitirle salir del país antes de su muerte. Xiaobo es el primer Nobel de la Paz que muere bajo custodia desde el fallecimiento en 1938 del pacifista alemán Carl von Ossietzky, encerrado en un campo de concentración por denunciar el rearme alemán.

La presidenta del Comité Nobel, Berit Reiss-Andersen, reaccionó con dureza a la noticia y afirmó que el Gobierno chino tiene "una gran responsabilidad" en la muerte de Liu Xiaobo, y recordó que, al otorgarle el Nobel de la Paz, se distinguió su compromiso y su lucha por la democracia en China.

El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, se declaró "profundamente triste" por el fallecimiento de Liu, pero a diferencia de otros líderes, evitó hacer llamamientos al Gobierno chino sobre la situación de la viuda del intelectual.

Human Rights Watch criticó la "crueldad" demostrada por el Gobierno chino a raíz de la muerte de Xiabo.

El ministro francés de Exteriores, Jean-Yves Le Drian, expresó su "profunda tristeza" por la muerte del intelectual chino y pidió libertad de movimiento para sus allegados.

El secretario de Estado de EEUU, Rex Tillerson, lamentó la "trágica muerte" de Liu y pidió al Gobierno chino liberar a su viuda, Liu Xia, del arresto domiciliario en el que se encuentra para que pueda "abandonar China".