Cristiano Ronaldo, internacional portugués del Real Madrid, no se plantea pagar los 16.3 millones de dólares que presuntamente defraudó a la Hacienda, tal y como figura en la denuncia de la Fiscalía, antes de acudir a declarar al Juzgado de Instrucción número 1 de Pozuelo de Alarcón (Madrid) el 31 de julio y por tanto mantiene su postura en el litigio, confirmaron a fuentes de Gestifute, la empresa que representa al futbolista.

De esta forma, la compañía que lleva los asuntos de Cristiano sale al paso de los contínuos comentarios que hablan del pago inmediato de los 16.3 millones de dólares que le reclama la Hacienda.

El futbolista, tras surgir el conflicto con el fisco, contrató los servicios del despacho Baker&McKenzie, donde los abogados José María Alonso Puig y Luis Briones dirigen la defensa del jugador luso.

Cristiano fue citado para el último día de julio por la jueza que investiga el caso, Mónica Gómez Ferrer, como investigado, según comunicó el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM).

La Fiscalía acusa a Cristiano de crear una estructura societaria para defraudar 16.3 millones de dólares de forma “consciente” y “voluntaria” y le imputa cuatro delitos contra la Hacienda cometidos entre 2011 y 2014.

CR7 se encuentra en Rusia disputando la Copa Confederaciones, torneo en el que fue elegido como el mejor jugador de los dos partidos disputados por su selección, ante México y Rusia.

Encaró el torneo con el disgusto de esta acusación e incluso, según publicó el viernes el diario deportivo luso “A Bola”, tendría la intención de no volver a jugar en España, aunque el presidente del club blanco, Florentino Pérez, tiene previsto solucionar la situación cuando termine el torneo.

Cristiano, que no se ha expresado públicamente sobre esta cuestión al margen de decir tan solo que tiene la “conciencia tranquila”, rechazó responder a las preguntas de los periodistas sobre estos hechos tras el encuentro frente a Rusia.

Su seleccionador, Fernando Santos, salió el miércoles en defensa de su estrella y afirmó: “Deben respetar la vida privada de CR7. Hizo bien en no responder a preguntas. Ya tendrán tiempo de hacerle las preguntas”.