En Cochabamba opera una banda que se especializa en robar instrumentos musicales, equipos de sonido y de amplificación a las orquestas, empresas que ofertan servicios de amenización de fiestas y a las iglesias evangélicas del Cercado, del Valle Bajo y Alto. Los delincuentes continúan prófugos, pero la Policía sigue su rastro y ya logró recuperar parte del botín en la casa de un “alberto” o persona que recibe objetos robados para comercializarlos de nuevo.

El director de la fuerza anticrimen, coronel Gualberto Díaz, dijo que en un patrullaje por la zona de Cala Cala se divisó una vagoneta que transportaba equipos de sonido y se logró dar con la casa de Francisco R.C. (50) y de su hijo Óscar R.F. (23). Allí encontraron un montón de objetos, presuntamente robados. Ambos declararon que compraron todo de un delincuente cuyo nombre “no recordaban”. Los dos permanecen detenidos. Díaz sostuvo que tienen varias denuncias de robos y todas las víctimas coinciden en señalar que los delincuentes ingresan a las fiestas como invitados, o como fieles, a los cultos de iglesias y se esconden en los inmuebles para luego saquear los equipos de música.

La Policía recuperó consolas, medusas, poderes, computadoras, instrumentos musicales, amplificadores, electrodomésticos, televisores y otros. Las víctimas relataron que les robaron equipos valuados en 7, 10, 15 y hasta 20 mil dólares.