En muchos países, las ferias del libro son acontecimientos que, por su tamaño, calidad y cantidad de ofertas, y sobre todo por sus invitados, promueven el turismo interno y hasta externo. No son pocos los compatriotas que, por ejemplo, viajan hasta Buenos Aires (Argentina) tras la pista de un gran autor o con el único fin de enriquecer sus bibliotecas con títulos que no se pueden hallar en Bolivia.

Desde hace unos años y a partir de un crecimiento que los bolivianos lectores celebramos, la Feria Internacional del Libro de La Paz y su similar de Santa Cruz son también buenas excusas para tomar un avión o flota rumbo a esas capitales. Esta última abrió sus puertas el pasado 31 de mayo y se extenderá hasta el 11 de junio.

La FIL Santa Cruz reunirá en esos días a más de medio centenar de autores extranjeros, entre los que figuran los españoles Almudena Grandes y Luis García Montero. La muestra literaria, que tiene a Alemania como país invitado de honor, congregará a 150 editoriales y espera a más de 100.000 visitantes, aseguró a EFE la presidenta de la entidad organizadora, la Cámara Departamental del Libro de Santa Cruz, Sara Mansilla.

El miércoles 7 los asistentes a la feria disfrutarán de un encuentro con el poeta García Montero, autor de libros como “Vista Cansada” (2008), y el jueves 8 de junio, de una conferencia magistral de Grandes, autora de la novela "Inés y la alegría" (2010). También confirmaron su presencia Fernanda Trías (Uruguay), Enrique Solinas (Argentina), Amanda Pedrozo (Paraguay), Mario Bojórquez (México), María Palitachi (República Dominicana), Paola Valderde (Costa Rica) y Dennis Ávila (Honduras). Además, participarán las chilenas Andrea Jeftanovic y Alejandra Costamangna, la colombiana Piedad Bonnet y el peruano Carlos Aramburo, entre otros autores.

Mansilla destacó la participación del brasileño Roger Mello, el "primer sudamericano" en recibir el premio Hans Christian Andersen en Ilustración (en 2014), considerado como el Nobel de Literatura Infantil y Juvenil. Entre los autores destacados de Bolivia, la feria incluirá las presentaciones de Magela Baudoin (Premio García Márquez de Cuento 2015), Gonzalo Lema (Premio Internacional de Novela Negra LH Confidencial 2017), Giovanna Rivero, Liliana Colanzi, Edmundo Paz Soldán y Maximiliano Barrientos.

El país invitado de honor, Alemania, patrocinará la presencia de la periodista y escritora Nikola Richter, del escritor de novelas policiales Gisbert Haefs y del subdirector del Instituto Iberoamericano de Berlín, Peter Altekrüger. Además, ese país organizará un encuentro de poesía organizado por Alemania, que concentrará a poetas de 14 naciones.

Se trata, pues, de una cartelera por demás atractiva, como para hacer maletas hoy mismo. Y es también un motivo de envidia para los lectores cochabambinos. Nuestra Feria Internacional del Libro, que suele efectuarse durante el mes de octubre, es relativamente joven. El año pasado cumplió su décima versión. Es cierto que cada gestión ha tenido un crecimiento sostenido de ofertas, público y participantes, pero ciertamente, a diferencia de lo que sucede en La Paz y Santa Cruz, aún no ha tenido un invitado de una estatura mundial en nuestro idioma.

Lo anterior también es culpa de un público local que no suele apoyar mayoritariamente la actividad cultural. Ni siquiera las autoridades lo hacen (raras han sido las presencias de alcaldes o gobernadores en los actos de inauguración a lo largo de esta década). Recién el año pasado el acontecimiento logró superar la barrera de los 20 mil asistentes, por lo menos llegando a una cifra de personas similar a la de un clásico de fútbol local.

Superar este escollo es uno de los retos de la Cámara Departamental del Libro, tarea para la cual será también importante mejorar la calidad de los invitados, así como las ofertas para el público lector.