El colegio María Cristina, ubicado en la zona de Pampa Grande, al oeste de la ciudad, alberga en sus aulas a jóvenes trabajadores y adolescentes que provienen de hogares desintegrados, a quienes los maestros les brindan apoyo psicopedagógico, informó el director del establecimiento, Henry Cruz. “Hacemos un seguimiento personalizado a los estudiantes, les brindamos recomendaciones y trabajamos en sus proyectos de vida, para su futuro”, afirmó Cruz.

El establecimiento, a decir de Cruz, trabaja también en la prevención y la recuperación de valores.

Esta unidad educativa, que tiene aproximadamente 340 estudiantes, cumplió el 20 de mayo un nuevo aniversario (30 años), con el compromiso de seguir creciendo en beneficio de la población.

La infraestructura del colegio puede albergar a 1.200 estudiantes, pero todavía no usa su máxima capacidad, debido a que no todos los padres de la zona confían en este establecimiento educativo.