El secretario general de la Federación Boliviana de Fútbol, Marcos Rodríguez, manifestó que “Bolivia y ningún país de Sudamérica no está listo para la implementación del Video Arbitraje (VAR)” porque es “un instrumento tecnológico muy costoso”.

El pasado miércoles en el Congreso de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, hizo oficial el anuncio para implementar esta tecnología en el Mundial de Rusia 2018.

“Vamos a utilizar el VAR en el Mundial porque hasta ahora solo tenemos una respuesta muy positiva”, aseguró el titular del balompié mundial.

Sin embargo, Rodríguez espera que la FIFA y Conmebol brinden un apoyo económico a las federaciones afiliadas para contar con dicha tecnología.

En el fútbol boliviano también se han registrado jugadas y goles que fueron motivo de discusión. Provocando polémica y susceptibilidad entre los dirigentes y acusando al árbitro por la “mala aplicación de la normativa”.

“Esperamos que se pueda implementar el VAR en los partidos internacionales en Sudamérica. Ni Brasil que es un grande del fútbol está preparado para apelar a esta nueva tecnología para el balompié”, explicó Rodríguez.

El directivo de la Federación desconoce el costo real del equipo, pero se enteró que “son muy caros” porque además tiene un sistema que debe ser monitoreado y utilizado por un experto.

Rodríguez considera que los organismos internacionales deben organizar cursos de capacitación para las federaciones miembro, para conocer los alcances del sistema VAR.

Según las redes sociales y algunos medios de comunicación en el país, manifestaron que el presidente de BAISA, Marcelo Claure, expresó: “Me ofrezco a pagar por esta tecnología para la Liga en Bolivia, así no habrá más errores en el arbitraje”, escribió en su cuenta personal de Twitter.

Rodríguez tomó la palabra al empresario y expresó que: “A caballo regalado no se le miran los dientes. Todo lo que nos quieran donar será bien venido, es un aporte para el bien del fútbol”.



OJO DE HALCÓN La FIFA también implementó en el Mundial de Brasil 2014 el Ojo de Halcón con el propósito de evitar los goles fantasmas.

El sistema informático genera una imagen de la trayectoria de la pelota que puede ser utilizado por los jueces para decidir en jugadas dudosas para identificar si la pelota pasó o no la línea de gol.

El fútbol y otras disciplinas deportivas en el mundo deben apelar a la tecnología para evitar los errores arbitrales.