Humberto Vía Vargas, el hombre que fue condenado a 30 años de prisión, por asesinar a su suegra, intentó ayer salir en libertad, argumentando que su sentencia no ha sido ejecutoriada, pero un tribunal de Cochabamba rechazó su solicitud.

Vía Vargas presentó el certificado de nacimiento de una niña en su afán de probar que tiene familia y cumplir con el requisito de un elemento arraigador, pero las autoridades judiciales consideraron que el mismo es insuficiente porque no existe un nexo sentimental con la menor ni con su madre. Además, no desaparecieron otros riesgos procesales como el peligro de represalias para los familiares de Martha Raya Mamani, quienes fueron amenazados de muerte por Vía.

El hombre de 31 años fue integrante de una temible pandilla en Vinto y, según un peritaje psicológico, es un psicópata que no siente empatía ante el dolor de otras personas y representa un riesgo para la sociedad. Vía Vargas se casó con la hija mayor de Martha Rejas Mamani, pero era muy violento y ella huyó de Combuyo, Vinto. Vía la siguió para agredirla de nuevo; ella lo denunció y la joven fue a refugiarse a la casa de sus padres en Ivirgarzama. Hasta allí la siguió Vía y mató a su suegra, apuñalándola en el cuello, el 8 de junio de 2015.