LUCCA

El G-7 acordó ayer en Italia fomentar una solución "política y no militar" en Siria en la que participe activamente Rusia junto a la comunidad internacional y rechazó una propuesta británica de nuevas sanciones contra Moscú.

El ministro de Exteriores italiano, Angelino Alfano, que presidió la reunión del G-7, dijo que "no existe una solución puramente militar al conflicto de Siria", sino una política "que pasa por favorecer una nueva Constitución y un proceso político que lleve a celebrar unos comicios que pongan en mano de los sirios el futuro del país". "Necesitamos dialogar con Rusia, evitando aislarla y también alentando a (el presidente ruso Vladímir) Putin para que ponga fin al apoyo" al régimen del presidente sirio, Bachar al Asad, porque "Rusia tiene toda la fuerza para presionar al Mandatario sirio para que decrete el alto el fuego", dijo Alfano.