Pese al auge de las nuevas tecnologías, al uso masivo que de ellas hacen sobre todo niños, adolescentes y jóvenes, y a cómo se ha ido de ese modo perdiendo el hábito de la lectura de libros, semanalmente los medios del mundo informan de nuevas investigaciones que confirman los beneficios de leer, muy especialmente para los infantes.

Por ejemplo, el portal de Univisión señaló estos días que: “Fomentar la lectura en los niños es primordial para su desarrollo y debemos inculcar este hábito desde pequeños. La lectura incita a los niños a imaginar, los lleva a conocer mundos maravillosos y a vivir aventuras extraordinarias. Leer es primordial para estimular el desarrollo intelectual de nuestros hijos y los ayudará a tener un mejor dominio del lenguaje. Debe comenzar desde que son bebés, ya que los primeros tres años son claves para su desarrollo cognitivo”.

Así, pues, los libros y la lectura representan una oportunidad de viaje a muchos mundos sin moverse de donde uno está. Ya lo dijo igualmente el escritor Mario Vargas Llosa a tiempo de recibir el Nobel de Literatura, acordándose de cuando aprendió a leer en esta misma ciudad: “Aprendí a leer a los cinco años, en la clase del hermano Justiniano, en el Colegio de La Salle, en Cochabamba (Bolivia). Es la cosa más importante que me ha pasado en la vida. Casi setenta años después recuerdo con nitidez cómo esa magia, traducir las palabras de los libros en imágenes, enriqueció mi vida, rompiendo las barreras del tiempo y del espacio permitiéndome viajar con el capitán Nemo veinte mil leguas de viaje submarino, luchar junto a d´Artagnan, Athos, Portos y Aramís contra las intrigas que amenazan a la Reina en los tiempos del sinuoso Richelieu, o arrastrarme por las entrañas de París, convertido en Jean Valjean, con el cuerpo inerte de Marius a cuestas”.

Por todo ello es que celebramos la segunda versión de la Expolibro, actividad que se abrió el jueves en la céntrica plazuela Del Granado, donde 34 expositores pretenden promover la lectura y combatir la piratería. El presidente de la Cámara Departamental del Libro, René Rivera, informó que hoy y mañana el acontecimiento continuará entre las 10.30 y 21.30 horas. Este sábado, la actividad incluye diálogos con los autores Ana Triveño (11.00), Miguel Lundin (11.30), Nevando Andeslis (18.00), Ramón Rocha Monroy (19.30 y sobre Gabriel García Márquez y Bachelard) y Shariel Baptista (20.30).

A decir de Rivera a nuestro matutino, la promoción de lectura solo se hace factible mediante la oferta de libros a precios rebajados, razón por la que la CDLC ha instado a los participantes de la feria a vender sus publicaciones con un 30 por ciento de descuento en promedio. Afirma que no tiene sentido que los visitantes encuentren en una feria como la Expolibro volúmenes que en las librerías se venden a precios similares o incluso mayores.

La otra condición del evento es ofrecer solo títulos originales, ya sean nacionales o importados, para plantar cara ante la venta de copias ilegales (“piratería”), una práctica tan extendida en el medio local y nacional. Para la CDLC, la dinámica de la Expolibro se presta para combatir a la piratería, pues se instala en un lugar similar como es una plazuela de acceso público, sin que medie costo de ingreso y con una oferta de productos a precios accesibles.

Uno de los indicadores de la efectividad de esta modalidad de oferta es que en esta Expoferia no solo participan más expositores que en las anteriores ferias, sino varios procedentes de otras ciudades. Según la CDLC, entre los 34 inscritos hay participantes de siquiera seis ciudades del país e incluso uno del extranjero (Perú).