El ministro de Medio Ambiente y Agua, Carlos Ortuño, y el gobernador de Cochabamba, Iván Canelas, firmaron ayer un convenio por 3 millones de bolivianos para realizar los estudios de pre- inversión que permitirán construir dos aducciones entre la presa de Misicuni y cinco municipios, según informó ABI.

También firmó la transferencia de 21 millones de dólares que estarán destinados para las obras de la construcción de la aducción a la zona sur.

Sobre los ductos, el Ministro informó que uno estará conectado entre la planta de tratamiento de agua de la represa, ubicada en la zona de Jove Rancho y los municipios de Tiquipaya, Cochabamba y Sacaba.

Esa tubería recorrerá 20.3 kilómetros en su estructura principal y más de 34 kilómetros de conexiones secundarias, así como siete estaciones de bombeo de agua para zonas altas.

Explicó que otro ducto será complementario a uno que se hará entre la presa y el municipio de Quillacollo. Estará conectado con Vinto y Sipe Sipe. Tendrá 18 kilómetros de extensión.

Las autoridades prevén que los estudios estarán listos en agosto.

Ortuño sostuvo que la Gobernación deberá inscribir el presupuesto para esos proyectos e iniciar los procesos de contratación para tal propósito.

“Queremos tener en esta gestión 2017 concluidos los tres estudios (a diseño final) concluidos”.

Convocó a los alcaldes del eje metropolitano a coadyuvar más en este tema que tiene que ver con canalizar el agua de Misicuni a sus poblaciones.

Canelas hizo énfasis en que estas acciones (apoyo económico) son una muestra más de que la inversión en agua es una prioridad para la Gobernación y el Gobierno.