LAS PLAGAS Y LA SEQUÍA DAÑAN CADA AÑO LOS CULTIVOS DE SOYA, MAÍZ, TRIGO Y SORGO. AGRICULTORES, PEQUEÑOS Y GRANDES, AFIRMAN QUE EN OTROS PAÍSES SE PRODUCE EL TRIPLE EN LA MISMA EXTENSIÓN.
Agro pide semillas transgénicas para triplicar su rendimiento
Juana Arias Mamani y su esposo cuentan con 20 hectáreas de terrenos en el norte de Santa Cruz, y el año pasado cosecharon 50 toneladas de soya, en la campaña de verano. Sin embargo, la situación se torna complicada esta gestión, toda vez que esta agricultora prevé que sus tierras producirán "apenas" 30 toneladas, a causa de la sequía y de varias plagas que afectan a cientos de agricultores de este departamento.
Para solucionar el problema de las plagas y aumentar la productividad, los agricultores de Santa Cruz y las instituciones que los agrupan piden al Gobierno central autorización para el uso de semillas transgénicas que sean resistentes a las plagas y a la sequía.
En Santa Cruz, casi el 100 por ciento de la soya que se cultiva es transgénica, pero los agricultores requieren de otras variedades que sean resistentes a las plagas que aparecen y destruyen los cultivos de soya, sorgo, maíz y trigo, entre algunos.
Los agricultores apuntan también, con las semillas transgénicas, a triplicar su producción. Dieron como ejemplo que en Santa Cruz se cosecha aproximadamente tres toneladas de maíz por cada hectárea, mientras que en Argentina el rendimiento llega a nueve toneladas en la misma extensión.
La agricultora Juana Arias Mamani, de 50 años, señala que la caída del precio de la soya, de 400 dólares la tonelada, hace un par de años, a 250 en 2016, no les permite generar ganancias con sus cultivos y, al contrario, pierden dinero, al extremo de que no les alcanza ni para el gasto diario de la casa.
Por este motivo, Juana se ve obligada a vender refresco en su comunidad de Faja Bolívar para poder mantener a su familia.
El pedido de Juana, que coincide con los otros agricultores, es que el Gobierno autorice el uso de semillas más resistentes a las plagas y la sequía, y que se mejore el precio de la soya, hasta por lo menos 300 dólares la tonelada.
DEMANDAS La Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO) puntualizó que no se puede competir en igualdad de condiciones con los agricultores de otros países, si no se aplica la biotecnología en Bolivia para los diferentes cultivos: soya, maíz, sorgo y trigo, entre algunos.
En la misma dirección, el presidente de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), Susano Terceros, señaló que para combatir al gusano cogollero, que ataca principalmente al maíz, los agricultores deben fumigar hasta siete veces durante una campaña, lo que implica mayor inversión en insecticidas y contaminación al medio ambiente.
Esta situación se podría revertir, según Terceros, si se permitiese el uso de semillas transgénicas que sean resistentes a la sequía y a las plagas.
El presidente del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), Antonio Rocha Gallardo, afirmó que el grano transgénico, en el caso del maíz que se produce en Argentina, es más grande, de mejor calidad y libre de microtoxinas, y se produce más por cada hectárea (el triple).
Gusano pegador daña cultivos
La representante de los pequeños productores del norte de Santa Cruz, Silvia Vale, informó que esta última campaña de verano los cultivos de soya están siendo afectados por el gusano pegador, que se come las plantas.
Vale, al igual que los otros agricultores, afirmó que introducir al país nuevos eventos tecnológicos (semilla transgénica) permitirá tener menos pérdidas y triplicar la productividad de los granos.
“Tenemos soya transgénica para las malezas, pero pedimos otra para que sea resistente a las plagas. La biotecnología es una herramienta necesaria para el agricultor”.
Ciro Yupanqui, de 39 años, es otro productor de soya en el norte de Santa Cruz. Afirmó que la cosecha para este año es incierta por el ataque del gusano pegador y de otras plagas. En la campaña del año pasado logró obtener 1.8 toneladas por hectárea y este gestión espera tener al menos una tonelada.
70 por ciento
De los alimentos
El presidente de la Anapo, Susano Terceros, recordó que en Santa Cruz se produce el 70 por ciento de los alimentos que se consumen en el país.
Terceros puntualizó que la agricultura es una actividad que genera miles de fuentes de empleo para los bolivianos en general, en forma directa e indirecta.
6 Demandas tienen los agricultores
Las demandas de los agricultores se pueden resumir en seis, según la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo: el uso de semillas transgénicas; seguridad jurídica, que sean dueños de su tierra; mercados seguros para su producción; liberación plena para las exportaciones, que se detengan los avasallamientos, además de penas más duras para los que cometen abigeato.
Usan desde 2005 soya transgénica
Bolivia empezó a utilizar una variedad de semilla transgénica de soya, desde 2005, y el rendimiento subió de 1.7 toneladas por hectárea a 2.1, según el presidente de la Cámara Agropecuaria del Oriente, Freddy Suárez.
Agregó que con el uso de semillas transgénicas se dejaría de gastar cada año al menos 78 millones de dólares que se emplean en fungicidas.
Producto sostenible de exportación
La soya en Bolivia es el tercer producto de exportación, después del gas y los minerales, pero a diferencia de los dos primeros se trata de un recurso renovable, afirmó el gerente general del Instituto de Comercio Exterior, Gary Rodríguez. En la campaña de invierno se cultivaron 1.3 millones de hectáreas.
“En el tiempo que utilizamos la semilla transgénica, Bolivia pudo catapultarse para estar entre los 10 primeros productores de grano de soya en el mundo”.
