El Gobierno decomisó ayer un cargamento de 75 armas de uso militar proveniente de Estados Unidos, que fue hallado en el doble fondo de un remolque para vehículos y previamente transitó por puertos de República Dominicana, Perú y Chile, antes de ingresar a territorio boliviano.
El ministro de Gobierno, Carlos Romero, y la presidenta de la Aduana Nacional, Marlene Ardaya, presentaron en Santa Cruz  las armas que estaban acopladas a una maquinaria agrícola importada, que tenía como destino final esa ciudad.
El arsenal está formado por 34 armas largas, entre fusiles, carabinas, metralletas, algunas con mira telescópica, y 41 pistolas. Las piezas son de fabricación estadounidense, rusa, checa, húngara, búlgara y rumana, según la agencia de noticias EFE.
El armamento decomisado fue entregado a las Fuerzas Armadas, para su correspondiente resguardo.
"Se va hacer un inventario técnico a través del comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, son armas de uso militar en cualquier parte del mundo", explicó.

DETENIDOS Las autoridades detuvieron a cuatro personas, entre ellas al conductor del camión y al supuesto destinatario del embarque, quien se hizo presente ante las autoridades para reclamar la maquinaría.
"Hay que ver cuál era el propósito de esta internación a territorio boliviano y quiénes son los integrantes de esta organización criminal", declaró a los medios el ministro Romero.
El cargamento fue embarcado el 22 de noviembre pasado en el puerto de Everglades, en Miami, y pasó por la terminal marítima dominicana de Caucedo y la peruana de Callao, antes de llegar a Arica, Chile, el pasado 7 de enero.
Romero dijo que "llama la atención" que las armas hayan sido embarcadas en Estados Unidos y que hayan pasado por puertos de cuatro países sin haber sido detectadas y anunció una investigación para establecer si hay una relación con la comisión de posibles actos ilícitos.
La Aduana boliviana hizo un seguimiento del cargamento cuando ingresó a territorio boliviano, desde Chile.
Además de las armas,  el camión contenía contrabando de teléfonos celulares por un valor de 46.000 dólares. Las autoridades evitaron revelar los nombres de los detenidos y de las empresas implicadas en las operaciones de importación, mientras se realizan las investigaciones.
Romero dijo que la revisión técnica del cargamento ilegal está a cargo de las Fuerzas Armadas y la investigación criminal, de la Policía especializada y el Ministerio Público.
El Ministro indicó que se solicitará información, a través de la Cancillería, a las autoridades de EEUU  de los  otros países con el fin de identificar a los remitentes de este cargamento.

El cargamento pasó por 4 países y burló controles de seguridad

La Aduana realizó el operativo de seguimiento y confiscación de armamento de contrabando tras observar que el contenedor sospechoso había pasado por República Dominicana, Perú y Chile antes de llegar a Bolivia.
"La carga ha dado una vuelta, eso es extraño, entonces nosotros le hemos hecho un seguimiento", dijo la presidenta de la Aduana Nacional, Marlene Ardaya.
La autoridad dijo que en la revisión por rayos X se identificó imágenes de armamento de caño largo y corto de diferente calibre, camuflado en el interior de un remolque de vehículos livianos.
El cargamento confiscado consiste en 34 armas largas (fusiles semiautomáticos, metralletas, carabinas, armas tipo FAL, de asalto - uso/entrenamiento militar) y 41 armas cortas, según el informe presentado por el ministro de Gobierno, Carlos Romero.
También se incautaron miras telescópicas con un alcance de hasta 3.000 metros.
El armamento estaba camuflando en el interior de doble fondos de las piezas de metal de un remolque para vehículos livianos.