Opinión Bolivia

  • Diario Digital | jueves, 28 de marzo de 2024
  • Actualizado 14:50

LA PUESTA EN ESCENA SERÁ ESTE VIERNES Y SÁBADO, EN EL MARTADERO, A LAS 21:00. EL INGRESO A LAS FUNCIONES TENDRÁ UN COSTO DE 30 BOLIVIANOS.

Montan obra de danza y teatro “Pieza-frágil”

Montan obra de danza y teatro “Pieza-frágil”



La obra de danza y teatro “Pieza-frágil”, dirigida por Camila Rocha e interpretada por Alejandra Díaz, será montada este viernes 27 y el sábado 28, en el mARTadero (avenida 27 de Agosto esquina Ollantay), a las 21:00. El ingreso a la obra, recomendada para mayores de 15 años, tendrá un costo de 30 bolivianos.

Según una nota de prensa del mARTadero, “Pieza-frágil” invita al público a “mirar un ser que a su vez se permite mirarse y mostrarse con honestidad; dejando expuesto su mundo interior lleno de contradicciones y vulnerabilidad ante el dolor y el enojo de una pérdida”.

A manera de describir la obra, Camila Rocha precisa que “Pieza-frágil” se consuma en un espacio blanco, una especie de limbo donde una actriz llena de prótesis debe lidiar con la dificultad para valerse por sí misma. En un texto difundido por el mARTadero, la directora indica que el escenario es un espacio contenido entre bloques de hielo, que “ayuda a la actriz a mantenerse fría y procurar mantener el control. Es la mirada de una sociedad que no deja de juzgarla, así como ella lo juzga todo desde la escena, especialmente a sí misma”.

La protagonista, apunta Rocha, es una “mujer de carne, huesos, piel y sangre viva”, que es interpretada por la actriz y bailarina Alejandra Díaz.

Sobre la atmósfera sonora que impera en la obra, apunta que está “casi siempre en tensión jugando con una gama de frecuencias graves que generan angustia, hasta que la trompeta de Chet Backer con ‘My funny Valentine’ aparece y cala hondo”.

Camila Rocha es una actriz de teatro, bailarina y coreógrafa de importante trayectoria en Cochabamba. En el último tiempo ha destacado por sus intervenciones en los montajes del elenco escénico KiknTeatr, dirigido por Diego Aramburo.