Ocurrió en Pampa San Miguel, al sur de la ciudad, la noche del domingo 18 de diciembre. Un joven llegó a su casa en estado de ebriedad y halló a su madre despierta, esperándolo. Discutió con ella y le exigió que le entregara el dinero que tenía ahorrado. La mujer, de casi 60 años, trató de ignorar los gritos y su hijo tomó una bolsa plástica negra y se la puso en la cabeza para asfixiarla.

Durante el forcejeo, la madre logró pedir auxilio y los vecinos corrieron a auxiliarla. “Casi me ha matado mi hijo”, lloró amargamente la mujer.

La Federación del Adulto Mayor reveló que de cada 10 quejas que reciben, cinco son de personas que denuncian que sus hijos pretenden despojarles de sus bienes o les exigen sus herencias, a cualquier precio. Otras cuatro denuncias son presentadas por violencia y una por abandono.