El vicepresidente de Paraguay, Juan Afara, expresó su "enérgico repudio" al "cobarde atentado" que ayer le costó la vida de ocho integrantes de la fuerza militar que combate en el norte del país a la guerrilla Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP)

"Mi enérgico repudio al cobarde atentado que costó la vida a 8 jóvenes paraguayos de nuestras Fuerzas Armadas", dijo en su cuenta de Twitter Afara, al frente del Ejecutivo en ausencia del presidente Horacio Cartes, quien se encuentra de regreso de su visita oficial a México.

Afara anunció además la cancelación de todas las audiencias que tenía previstas para el día de ayer, "ante la grave situación en el norte del país y la muerte de ocho inocentes de las Fuerzas Armadas".

Por su parte, la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), el contingente de militares y policías encargado del combate al EPP, declaró tras ese atentado que "no claudicará en el combate contra estos terroristas".

"Reafirmamos el compromiso del Gobierno Nacional en no claudicar en el combate contra estos terroristas, hasta su eliminación total", expresó la FTC a través de un comunicado.

Ocho miembros de la FTC murieron en la mañana de este sábado mientras patrullaban en un camino rural de la zona de Arroyito, en el norte del país y considerada una de las áreas de influencia de la guerrilla.

Varios atacantes detonaron un explosivo al paso de la patrulla y después perpetraron un ataque armado contra los efectivos, según el comunicado de la fuerza antiguerrilla.

El portavoz de la FTC, Raúl Pereira, explicó a Efe que, además de la explosión del artefacto, hubo varios disparos contra el vehículo en el que se desplazaba la patrulla militar.

El fiscal general del Estado, Javier Díaz Verón, que formó un equipo para investigar los hechos, aseguró que el atentado "enluta al país" y expresó su confianza en que la FTC pueda "dar con los delincuentes" que causaron el suceso, según un comunicado oficial.

La FTC fue creada en 2013 para combatir al EPP, al que el Gobierno responsabiliza de medio centenar de asesinatos desde su fundación en 2008, y que actualmente mantiene secuestradas a tres personas, un policía y dos colonos menonitas.